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miércoles, 14 de septiembre de 2011

Más hispanos viven en la pobreza en Estados Unidos


Por Yennifer Álvarez Jaimes,


El número de estadounidenses que viven bajo los niveles de pobreza alcanzó el récord de 46 millones de personas el año pasado, según los datos de la Oficina del Censo de los Estados Unidos.

El informe anual de ingreso, pobreza y acceso a un seguro médico reveló que el nivel de pobreza aumentó a 15.1%, comparado con el 14.3% en el 2009. Esto representa el cuarto incremento anual consecutivo y la cifra más alta en los 52 años desde que los estimados de pobreza se publican. La última cifra más alta se registró en 1993.


El ingreso promedio de las familias hispanas es mucho menor que el del resto de los habitantes de la Nación. (AP)

En cuanto a los grupos raciales, la Oficina del Censo divulgó que el número de hispanos que viven por debajo de la línea de pobreza en Estados Unidos aumentó a 13.2 millones de personas en el 2010, por encima del crecimiento de 1.3% en comparación con el año anterior.

Al mismo tiempo, el ingreso promedio de las familias hispanas es mucho menor que el del resto de los habitantes de la nación.

En el 2010 la media de ingresos anuales en los hogares hispanos fue de $37,759, comparado con los $38,667 del 2009. Para el resto de la Nación, el ingreso promedio fue $49,445.

Mientras, la tasa de pobreza en las familias compuestas por parejas como las familias compuestas por mujeres sin pareja aumentó significativamente.

En tanto, la tasa de pobreza aumentó para los niños menores de 18 años (de 20.7% en el 2009 a 22.0 por ciento en el 2010) y las personas 18 a 64 (de 12.9 % en el 2009 a 13.7% en el 2010), mientras que no fue estadísticamente diferente para las personas mayores de 65 años (9.0%).

Más personas recurren al Gobierno

El número de personas con seguro médico aumentó a 256.2 millones en el 2010 de 255.3 millones en el 2009. Sin embargo, entre el 2009 y 2010, el número de personas con cobertura de seguro médico privado disminuyó de 64.5% a 64.0 por ciento; mientras que el número de personas con cobertura de seguro médico del gobierno aumentó de 30.6 por ciento a 31.0 por ciento. El por ciento de personas con cobertura de seguro médico a través de su empleo disminuyó de 56.1 por ciento a 55.3 por ciento.

Sobre los beneficiarios de Medicaid, el número de personas con cobertura (15.9%) no fue estadísticamente diferente comparado con el número del 2009.

Se espera que antes de que finalice el mes se divulgue un informe similar sobre el estado de la pobreza en Puerto Rico.
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Emulan la entrega al prójimo de Sor Isolina


Nydia Bauzá / Primera Hora


Una joven reparte bolsitas de comida a deambulantes y una madre hace lo indecible por prevenir accidentes de conductores ebrios en las carreteras. Un fotoperiodista crea un taller educativo para niños de áreas marginadas y un naranjiteño ayuda a reconstruir orfanatos en África. Un paciente de epilepsia lidia contra las dolencias del mal y una mujer lucha para erradicar la violencia doméstica.

Ésta es la hoja de servicio de los seis puertorriqueños que recibirán el lunes próximo en una sesión especial en la Cámara de Representantes la medalla de la excelencia al prójimo Sor Isolina Ferré.

“Nuestra sociedad está cargada de noticias negativas. Sin embargo, a diario salen a la calle hombres y mujeres con un gran compromiso social que no se quedan cruzados de brazos a esperar que otros resuelvan los problemas, sino que son ellos quienes se disponen a hacer la diferencia”, dijo la presidenta de la Cámara, Jenniffer González, al anunciar los seis galardonados en una conferencia de prensa en el Capitolio, acompañada por el director ejecutivo de los Centros Sor Isolina, José Luis Díaz, y la historiadora de la institución, sister Rosita Bauzá.

En la categoría de desarrollo comunitario, recibirá la medalla, la joven Analís Barreto de la Torre, quien tiene una fundación llamada Bolsitas de Amor, quien ha repartido más de 4 mil bolsas de comida a deambulantes y adictos. No tiene una ruta fija; ha recorrido todo Puerto Rico. “Desde pequeña pude ver tanta necesidad y sentí la obligación de ayudar”, dijo Barreto, quien recientemente cumplió 17 años.

Elizabeth Rosado de Guidini, fundadora del centro de consejería a víctimas de violencia doméstica, niños maltratados y víctimas del crimen, Sendero, Inc., también recibirá la medalla Sor Isolina, por su servicio comunitario. “No basta con mirar de lejos, hay que ser parte de la solución”, sostuvo Rosado, cuyo centro ha atendido a más de 26 mil personas en los últimos 10 años.

En la categoría de prevención, los premiados son: Francisco Cabrera Mercado y Sonia Cruz de Señeriz. “Hace 26 años mi hijo Luis, con un futuro bien prometedor, perdió su vida por un conductor borracho… Mi corazón tiene siete espacios de todos mis hijos y el de Luis lo he dedicado al resto de la humanidad”, sostuvo Cruz de Señeriz.

“Para mí, es un honor trascender las fronteras de donde se libra la guerra que nadie ha podido ganar: el sida”, dijo, por su parte, Cabrera Mercado, quien ha dedicado gran parte de su juventud ha trabajar con los niños que deja huérfanos el virus mortal.

En la categoría de salud, recibirá medalla Radamés Garay Rodríguez, coordinador de servicios voluntarios de la Sociedad Puertorriqueña de Epilepsia, y en el área de educación, la distinción la recibe el veterano fotoperiodista de El Nuevo Día José Ismael Fernández Reyes, fundador del Taller de Fotoperiodismo, que ha beneficiado a unos 25 mil niños y jóvenes de los 78 municipios del país.

martes, 13 de septiembre de 2011

Municipios tienen que ponerse las pilas


Por Yennifer Álvarez Jaimes,


Los municipios tendrán que poner al día las cuentas pendientes con el Fideicomiso Perpetuo de Comunidades Especiales y de no haber cumplido con la construcción de la obra proyectada se verán obligados a devolver el dinero.

Así lo confirmó la presidenta de la Junta de Directores del Fideicomiso, Ciení Rodríguez, al aceptar en entrevista con EL VOCERO que hay algunos casos que pudieran llegar hasta los tribunales de ser necesario.


El Gobierno apostará a la colaboración de los residentes de las comunidades especiales para culminar los proyectos pendientes. Ante la falta de fondos que alega la administración de turno, la única solución parece ser la mano de obra gratuita de los propios vecinos de las comunidades afectadas. EL VOCERO/Luis A. López

La también asesora de Calidad de Vida del gobernador Luis Fortuño, adelantó que ya se han visitado 52 municipios para saber en qué etapa quedaron los proyectos que se supone fueran financiados con los fondos del Programa de Comunidades Especiales.

A preguntas de este rotativo, Rodríguez admitió que a la actual administración le ha tomado todo lo que va de cuatrienio en tratar de descifrar los activos y los asuntos pendientes del Programa de Comunidades Especiales.
 La funcionaria recordó que los empleados del Programa han tenido que visitar las áreas de construcción en cada uno de estos municipios para corroborar qué está construido y qué no.

“Muchas veces en el papel dice que está construido el 80% de la obra y cuando vas al ‘field’ (campo) no es cierto o las casas están pero no son habitables porque no tienen los servicios básicos ni los permisos”, sentenció la Presidenta del Fideicomiso.

Tanto Rodríguez como el licenciado José Giovanni Ojeda, coordinador general de la Oficina de Comunidades Especiales, rechazaron que la dilación en las visitas a las obras de construcción esté causada por la falta de empleados tras los despidos vinculados con la Ley 7 de Emergencia Fiscal.


Tanto el licenciado José Giovanni Ojeda, a la izquierda, como Ciení Rodríguez, al fondo, rechazaron que la dilación en las obras de construcción esté causada por la falta de empleados tras los despidos vinculados con la Ley 7 de Emergencia Fiscal. EL VOCERO/Ingrid Torres

La plantilla de empleados de la Oficina de Comunidades Especiales bajó de 250 a 34 empleados tras las cesantías en 2009.
Buscan mano de obra comunitaria

El Gobierno apostará a la colaboración de los residentes de las comunidades especiales para culminar los proyectos pendientes. Ante la falta de fondos que alega la administración de turno, la única solución parece ser la mano de obra gratuita de los propios vecinos de las comunidades afectadas.
 El programa se llamará la Obra en tus Manos y se trata de recabar la colaboración de los residentes para terminar los proyectos y el Gobierno pone los materiales.

El director ejecutivo de la Oficina de Comunidades Especiales, José Giovanni Ojeda, recordó la labor de la División de Educación para la Comunidad (DIVEDCO) durante la administración del ex gobernador Luis Muñoz Marín y aseguró que esta fórmula de trabajo mutuo entre la comunidad y el Gobierno ha funcionado con éxito.

“Bajo la DIVECO hubo un programa muy efectivo en el que se iba a la comunidad, se identificaban las personas capacitadas y se hacía la obra juntos. Identifícame quiénes son maestros de obras, quiénes son plomeros, electricistas, carpinteros. Y te sorprenderías, pero todas las comunidades siempre tienen gente para poder hacer este tipo de trabajo”, aseguró el funcionario.

Por su parte, la presidenta del Fideicomiso Perpetuo de Comunidades Especiales, Ciení Rodríguez dijo que “hay un llamado al liderato comunitario para que se una a este esfuerzo y entienda que el Fideicomiso no funciona”.
 “Toda inversión que haga el Gobierno va tener que ser utilizada para pagar la línea de crédito. Así que el Fideicomiso como estructura, lamentablemente, al haber sido comprometido en el 100% y más porque se comprometieron hasta los intereses, realmente no funciona”, concluyó la también asesora de La Fortaleza.

viernes, 29 de julio de 2011

Oasis para una ciudad haitiana

Por Carmen Milagros Díaz,

PUERTO PRÍNCIPE, Haití- Lucy Decilnée, una niña haitiana de 12 años de edad sufre diarrea casi todos los días debido al agua que toma según le ha dicho el médico a su madre.

Ayer no podía creer que ya no tendrá que tomar el “agua que duele” porque tomará agua potable gracias a una planta de filtración inaugurada en Croix des Boisquets, ubicado a unas siete millas de Puerto Príncipe donde todavía permanecen los toldos azules como refugios provisionales de los que quedaron sin hogar luego del devastador terremoto hace un año y medio.


La planta de filtración, bautizada Eau de Vie, que en español significa Agua de vida, produce seis mil galones del preciado líquido. Suministrada.

Bautizada como Eau de Vie, que en español significa Agua de vida, la planta de filtración produce seis mil galones del preciado líquido y representa para los haitianos una oportunidad más de vivir al evitarles la muerte por deshidratación y enfermedades como cólera, malaria, tifoidea y diarrea crónica entre otras.

“En Haití el agua es vida dos veces porque es agua que pueden tomar y porque se hacen letrinas”, expresó Samuel González, presidente y principal oficial ejecutivo de Fondos Unidos.

El suministro de agua es el resultado de la unión de esfuerzos de la Agencia de Servicios Sociales Pentecostales (ASSPEN) y Fondos Unidos de Puerto Rico que reciben donativos de personas y empresas que solidarizan con la necesidad de otros.

La ceremonia se realizó sin bombos ni platillos, sólo habían pequeñas bombas azules en el techo como decoración y una cinta que una vez cortada dejó inaugurado el centro de flitración. Un hermoso coro de niñas vestidas con trajes de colores brillantes captó la atención de los presentes cuando comenzaron a cantar Oh happy day, oh la,la,la.

Este logro ocurre luego de un primer intento en que se cavó un pozo y los resultados de laboratorio arrojaron que el agua requería un tratamiento muy costoso.

De acuerdo con el reverendo Esdras Santiago, presidente de ASSPEN, la planta de filtración despachará el líquido de forma gratutita por un año y luego la venderán a un costo que sea accesible y permite asumir los gastos de tener tres personas a cargo empleadas.

“Si el agua se vende a siete dólares, pues la vendemos a dos dólares”, indicó el religioso.

Fondos Unidos también canalizó otras aportaciones como medicamentos, alimentos y artículos personales a los refugios y la clínica de salud que dirige el doctor José Vargas Vidot a través de Iniciativa Comunitaria.

“Estamos hablando de tener la experiencia de meter la mano en el saco de la muerte y poderlos sacar de ahí”, manifestó el doctor José Vargas Vidot.

Vargas Vidot, recabó al pueblo puertorriqueño a que continúe con sus donativos tanto monetarios como de medicamentos. El galeno llegó a la capital haitiana junto a un grupo de poco menos de 10 voluntarios, entre ellos médicos, que se unieron a los 16 que donan su tiempo en la clínica general donde regularmente atienden a unos 180 pacientes. Algunas de las condiciones que mayormente atiende son asma, cólera y condiciones de la piel como dermatitis.

Ejecutivos multisectoriales pudieron observar el fruto de las donaciones, entre ellos: el presidente de United Way Worldwide, Brian gallagher; PepsiCo Frito Lay, American Airlines y American Eagle que semanalmente permite que los voluntarios de la clínica de salud viajen y lleguen medicamentos.

martes, 26 de julio de 2011

Gladiolas se convirtió en polvo y escombros

por Istra Pacheco

Luego de fuertes múltiples estruendos que retumbaron en el pecho de los que fueron testigos presenciales, ayer cayeron las cuatro torres del complejo residencial público Las Gladiolas a las 10:08 de la mañana.

Unas pocas nubes altas y un sol radiante, en todo su esplendor, sirvieron de marco para la impresionante caída que tardó alrededor de 30 segundos desde la primera detonación.

El lugar construido en 1969 llegó a albergar a más de 676 familias para las que tenía capacidad.

Se requirió de un total de 3,000 libras de dinamita, que fueron incrustadas en 8,900 huecos abiertos con barrenos en las paredes intermedias y bajas de los edificios, para tumbarlos.

Fotos del día de la implosión de Las Gladiolas Fotos del momento de la caída de Las Gladiolas Más fotos del antes, durante y después de la implosión Más fotos de los residentes y sus mascotas Media hora antes del momento pactado sonó la primera alarma y como si se tratara de una pieza de teatro, sirvió a manera de una “primera llamada” para que los residentes de la comunidad, la prensa y las autoridades empezaran a asegurar sus puestos.

A las 9:45 de la mañana volvió a sonar la alarma y lo mismo ocurrió a las 9:56 y a las 9:59.

Pero la explosión tardó.

Ansiosos por que iniciara la función, muchos se preguntaban qué había pasado. Jefes de agencias que observaban desde la azotea del Registro Demográfico, a más de 500 pies de distancia de Las Gladiolas, consultaban sus relojes para confirmar que no se habían equivocado.

Algunos residentes del complejo residencial que temporeramente fueron realojados en otros lugares y que también tuvieron acceso a la azotea empezaron a llorar.

En una rueda de prensa posterior, el ingeniero Carlos Furnier, gerente de la empresa CCC Joint Venture -encargada de las labores de implosión-, dijo que un tramo del cable que conectaba hasta los explosivos había perdido su conectividad.


“Hubo un retraso como de cuatro minutos, fue un problema de continuidad. Aparentemente no estaba haciendo contacto”, declaró el ingeniero.

Furnier detalló que se dieron cuenta del problema con un instrumento que precisamente mide la corriente.

Para resolverlo, tuvieron que cortar el pedazo de cable que no funcionaba, desecharlo y pegar los nuevos extremos.

Cuando se superó ese pequeño fallo técnico, escasos minutos después volvió a sonar la alarma de manera continua y, de pronto, como un trueno enviado por un rabioso dios Zeus, se detonó el primer explosivo.

En cuestión de segundos, las paredes de los cuatro edificios se fueron desmoronando, provocando gritos desgarradores de dolor entre los vecinos que estaban en la azotea del Registro Demográfico.

Los que veían el derrumbe desde los edificios cercanos que no fueron desalojados dijeron que hasta allí se escucharon los gritos.

Una nube de polvo, tal y como se predijo, voló en dirección a la Milla de Oro, pero se dispersó lo suficientemente rápido como para ver esos monstruos de 19 pisos de alto hechos añicos, formando varias montañas sobre el suelo.

“Las cuatro torres se cayeron al piso exactamente como estaba planificado”, declaró el ingeniero Furnier.

En términos similares se expresaron el secretario de la Vivienda, Miguel Hernández Vivoni, y el superintendente de la Policía, Emilio Díaz Colón.

Para el evento se cerró el espacio aéreo por unos 30 minutos y se desalojaron a cerca de 950 personas en un radio de 500 pies alrededor de los imponentes edificios.

Las calles y edificios en un espacio de 1,000 pies a la redonda del residencial, también se trató de que estuvieran libres de personas y mascotas.

Cientos de curiosos se arremolinaron en el puente sobre el caño Martín Peña, que era donde único se les iba a permitir estar de manera oficial.

Pero, otras decenas de personas del lado norte y sur de Las Gladiolas, respectivamente, aprovecharon los techos de los condominios, de sus casas o negocios para ver el espectáculo en palco.

Los tanques soterrados de gasolina de un puesto de venta que queda justo frente al complejo no sufrieron mayores percances, informó Hernández Vivoni.

Camiones del Cuerpo de Bomberos y camiones cisternas se movilizaron para echar agua sobre los restos de la estructura para evitar mayores fugas de polvo. Luego lavaron las calles aledañas.

A las 12:50 de la tarde, la Junta de Calidad Ambiental certificó que el aire no tenía mayores partículas del polvo fugitivo, por lo que dio la orden para que los desalojados pudieran regresar a sus hogares y se reabrieran los negocios del área.

Desde el 2002, los residentes del lugar batallaron para tratar de impedir que los desalojaran.

En ese momento denunciaron un intento de erradicarlos de forma atropellada del lugar en el que habían levantado a sus familias.

Muchos de ellos se unieron y combatieron los intentos gubernamentales que se realizaron por sacarlos de sus casas.

Entonces, fueron a los tribunales y agotaron todos los recursos hasta llegar al Circuito de Apelaciones de Boston, pero no lograron su meta.

La implosión fue inevitable.

Desaparecen Las Gladiolas, ejemplo de ingeniería social fallida

Por Maricarmen Rivera Sánchez,


Las Gladiolas, uno de los residenciales más grandes del área metropolitana, y cuya historia está enmarcada por la violencia de la década de los 90 y más reciente por la negativa de residentes a abandonar las deterioradas estructuras, quedó reducida a cenizas el lunes.


Poco después de las 10 de la mañana, las 3,000 libras de dinamita hicieron su efecto mientras un grupo de residentes observaban la implosión desde la azotea del Registro Demográfico.

La batalla de residentes por permanecer en el lugar duró hasta el año pasado cuando el Primer Circuito de Apelaciones de Boston determinó que debían abandonar los edificios que ya no estaban en condiciones habitables.

El secretario de la Vivienda, Miguel Hernández Vivoni reiteró que hay un acuerdo legal con estos residentes para que, una vez se construya el nuevo edificio de vivienda pública, puedan regresar unas 125 familias.

Estas torres, ubicadas a una cuadra de la Milla de Oro, tenían 676 unidades de vivienda. Aunque el actual superintendente, Emilio Díaz Colón, dijo que desde hace años en el lugar no hay problemas de violencia, el ex superintendente Pedro Toledo recordó que fueron varias las intervenciones que realizaron bajo el proyecto de ‘Mano dura’ de la administración de Pedro Rosselló.

“Eran muchos edificios en un área pequeña y eso causaba problemas. Igual que en otras áreas que existen, estaban encapsulados y no estaban utilizando esos edificios para lo que fueron diseñados”, dijo Toledo. “Con edificios más separados hay más espacio, pero estos edificios estaban todos uno al lado del otro y había un problema tremendo”.

En los pisos donde se colocó la dinamita, había una tela negra para evitar que salieran proyectiles. La gasolinera ubicada al cruzar la calle estaba desierta y –según se informó– también estaba protegida para evitar complicaciones con la privación que provocó la explosión. En horas de la mañana, cientos de personas y decenas de mascotas fueron desalojadas de las áreas aledañas para que no se afectaran con la implosión.

Hernández Vivoni dijo que el terreno debe estar limpio de escombros para abril y que desde esa fecha tomará entre 18 y 24 meses la construcción de la nueva vivienda pública.

Mirta Colón, líder comunitaria de Las Gladiolas, dijo que le dan “90% de confianza” al Secretario en su promesa de que las familias regresarán al área una vez haya edificios nuevos.

“Si bien no logramos prevalecer en el Tribunal, sí logramos estos acuerdos. Si no hubiera sido así, si hubieran logrado sacarnos sin dar la lucha, no hubiéramos tenido la oportunidad de regresar a nuestro entorno”, expresó Colón.

Un nuevo modelo

Hernández Vivoni aseguró que en el área se construirá un nuevo complejo de vivienda que constará de 220 unidades de familia, y que tendrán entre una a tres habitaciones. 120 del total serán habitadas por los antiguos residentes del lugar.

Las 100 unidades restantes serán ocupadas por solicitantes en lista de espera. La estructura contará con un centro comunal, áreas verdes y recreativas. Las viviendas estarán equipadas con sistema de alarma de detección de incendio. El nuevo complejo tendrá un costo de $30 millones.

El ex presidente de la Asociación de Constructores, Rafael Rojo, dijo que este modelo debe tener más éxito que el modelo derrumbado.

“Hoy día, estos modelos de vivienda como Las Gladiolas, son modelos que su momento ya pasó. Eran un poco rígidos, espacios confinados, creo que el puertorriqueño es una persona que le gusta la vivienda unifamiliar”, dijo Rojo. “Tiene que haber un balance entre lo que es la altura, la cercanía a los centros urbanos y el gobierno tiene que tratar de buscar ese balance”.

Hernández Vivoni dejó saber que el gobierno tiene en agenda cerca de cinco residenciales adicionales que serán demolidos.

lunes, 2 de mayo de 2011

Pobreza: realidad que muchos ignoran

Pobreza: realidad que muchos ignoran
María “Santitos” Rojas Rojas busca agua en una charca cerca de su casa. En el recuadro, uno de sus vástagos la consuela al pensar que le quitarán a sus hijos por no tener agua.
lunes, 2 de mayo de 2011
Bárbara J. Figueroa Rosa / Primera Hora

Orocovis. “No le deseo ni a mi peor enemigo tener que vivir sin agua”.

María “Santitos” Rojas Rojas trató de contener el llanto, pero la frustración pudo más que su intento cuando le relató a Primera Hora las vicisitudes que atraviesa por carecer de un servicio al que la mayoría tiene acceso en el país: el agua.

“Cuando uno tiene nenes chiquitos es bien difícil... esto no es fácil para nadie. Y te digo la verdad, yo no le deseo ni a mi peor enemigo tener que vivir sin agua”, dijo con un profundo sentimiento la vecina del sector Miraflores, del barrio Saltos, de Orocovis, municipio que se perfiló en el Censo del 2000 como el más pobre de Puerto Rico, pues el 63.4% de sus habitantes vivían bajo el nivel de pobreza.

Una década más tarde la historia parece repetirse pues, aunque parece increíble, la desventaja económica -al menos en Miraflores- es de tal magnitud que gente como Santitos tienen que acudir a una charca cercana para suplirse de agua.

Y es que la mujer de 25 años, madre de cuatro niños cuyas edades fluctúan entre los dos y ocho años, dijo que ella y su esposo José Gerardo Martínez resuelven a veces “buscando agua en casa de mi suegra”.

Pero, muchas otras ocasiones - tal como sucedió el día que Primera Hora visitó la comunidad- buscan el líquido en un pequeño cuerpo de agua que queda cerca de su residencia.

Paila en mano, Santitos se zumbó jalda abajo y fue en busca “aunque sea de un chispito de agua para poder limpiar y hacer otras cosas”.

“A los nenes yo no les doy a beber de esa agua... y yo cocino con agua limpia”, aclaró.

“Y a veces nos bañamos en la joya, ¿verdad, mami?” , dijo espontáneamente su hija Natalie, de cuatro añitos.

Santitos -cuyo esposo es un agricultor desempleado que se busca el peso colectando metales y aluminio en vertederos y basura- explicó que no tiene el servicio de agua a causa de una deuda que dejó su papá (quien se fue a vivir a Estados Unidos) en la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) desde el 2002.

“He tratado de buscar ayuda en el Municipio, en especial cuando se me enfermó uno de los nenes con bronquiolitis, pero no hicieron nada... a esta comunidad la marginan porque somos pobres y negros”, dijo la muchacha que recibe $600 de cupones, de los cuales $400 son utilizados en alimentos para la familia.

“Los chavos casi no dan, pero sobrevivimos. Porque te digo la verdad, el día que se pueda comer arroz y carne, se come. Cuando no, sancochamos guineos o ñame de monte. Además, yo pienso en esa gente que está en Haití, y nosotros estamos bien”, dijo resignada a quien le preocupa que el prejuicio que hay hacia la comunidad ponga en riesgo la estabilidad de su hogar.

“Mi miedo es que, como soy pobre y tengo necesidades como lo del agua, quieran venir a quitarme a los nenes. Eso no es justo porque yo soy pobre pero a mis nenes los cuido mucho y aquí todo el mundo lo sabe”, dijo la mujer en referencia a sus retoños.

“No, mami, no pienses en eso. Yo no quiero verte llorando ni temblando. ¿Verdad, señora, que nadie nos va a llevar?”, expresó Luis, el mayor de sus hijos, mientras le limpiaba una lágrima a su mamá.

Lo cierto es que Santitos hace lo que puede dentro de las circunstancias que la rodean a ella y a los demás residentes, donde la distancia parece ser su peor enemigo.

“Yo no tengo a los nenes chiquitos en Head Start porque me queda lejos y no hay una guagua que los pueda venir a buscar”, dijo quien tiene una baja escolaridad (octavo grado), una historia que se repite en casi todos los residentes del área, donde habitan cerca de 300 familias.

Este dato confirma las revelaciones del estudio Kid Count Puerto Rico 2010 que produjo la Coalición Nacional de la Raza, en el que se indica que el pueblo donde los niños viven con el nivel más alto de pobreza es Orocovis (77%). También es el que tiene la mayor proporción de niños recibiendo asistencia pública.

Cocinan al fogón

Otra de las peculiaridades del sector es que casi todos los residentes cocinan al fogón.

“Ay, mija, es que la comida al fogón sabe mejor... además, no tenemos chavos para pagar el gas”, dijo doña María Martínez mientras volteaba unas malangas, uno ñames y guineos que sancochaba en el ranchón donde tiene ubicado el fogón que prende dos veces al día para cocinar sus alimentos.

“Cuando se terminen de cocinar las viandas, las mezclo con un poco de bacalao, aceite y cebolla y listo”, dijo la anciana que compartiría los alimentos con otra vecina del lugar donde se percibe el cooperativismo.

Otro residente de Miraflores, Félix Rojas, quien vive junto con su esposa y dos hijas, de nueve y 13 años, lamentó que sus pequeñas no tengan “ni siquiera una cancha cerca en donde jugar”.

“Por nuestra condición económica, el único paseíto que les puedo dar al mes es cuando voy a hacer la compra al supermercado de Aibonito... chacho, eso pa’ ellas es bien divertido porque se dan su vueltita”, expresó quien acusa al alcalde, Jesús Colón Berlingeri de prejuiciarlos y negarles ayuda “porque somos populares. Y eso no debe ser porque su deber es ayudar al pueblo, no sólo a los penepés”, agregó el agricultor que gana $25 semanales buscando cosecha en una finca privada cerca de su casa.

Ayuda a la vista

Una entidad que se ha propuesto promover el autodesarrollo en Miraflores es la corporación sin fines de lucro Pathstone, una organización que desde el año pasado idea actividades para proveer ayuda a los trabajadores agrícolas del área.

“Nosotros lo que buscamos es readiestrar a muchos de estos trabajadores agrícolas en otros oficios, como hojalatería, soldadura o repostería. También les ofrecemos otros talleres a sus dependientes”, dijo Lilia Martínez, quien trabaja para Pathstone.

“La gente de Pathstone nos está ayudando a crear unas propuestas para lograr, por ejemplo, que nuestra comunidad tenga un centro comunal donde podamos hacer actividades y en conseguir algún medio de transportación para que los residentes puedan ir a sus citas médicas o de las agencias de gobierno sin preocupación alguna”, expresó, por su parte, Cándida Torres, presidenta de la Nueva Asociación Comunitaria de Miraflores.

martes, 21 de septiembre de 2010

Cumbre mundial por una utopía

21 Septiembre 2010

Cumbre mundial por una utopía
Varios líderes se reúnen alrededor de los Objetivos de Desarrollo del Milenio


Por EDITH M. LEDERER / The Associated Press

NACIONES UNIDAS - El presidente francés Nicolas Sarkozy se comprometió el lunes a incrementar la ayuda a los pobres del mundo en un 20% en los próximos tres años y exhortó a otros países desarrollados a que hagan lo mismo para cumplir con los objetivos fijados por las Naciones Unidas en su lucha contra la pobreza dentro del plazo establecido del 2015.

La campaña para cumplir con los Objetivos de Desarrollo del Milenio, proclamados hace diez años, no están avanzando al ritmo esperado y la tarea se demoró más todavía por la recesión mundial. Hablando ante la Cumbre del Milenio de la ONU, Sarkozy le pidió a los líderes mundiales que no caigan “en el viejo vicio” de ignorar la pobreza ahora que la economía mundial comienza a recuperarse.

Sarkozy dijo que Francia dona actualmente 10,000 millones de euros ($13,000 millones) anuales y agregó que la crisis financiera global afecta a los países ricos, creando déficits, pero “golpea mucho más a los pobres”.

El mandatario francés propuso la creación de un impuesto internacional a las transacciones financieras que ayudaría a cumplir las metas del milenio.

Su colega español José Luis Rodríguez Zapatero lo apoyó y dijo que la comunidad internacional debía asumir tres compromisos: “Primero, que los países sigamos manteniendo el esfuerzo de ayudada al desarrollo; segundo que pongamos en marcha fuentes innovadoras de financiación para cumplir los objetivos del milenio y la más clara, la más directa, es una tasa a las transacciones financieras internacionales”.

El presidente israelí Shimon Peres, mientras tanto, afirmó que la paz y la alimentación eran vitales.

“Sin paz, seguirá la pobreza. Sin alimentos, no habrá paz”, expresó.

Más de 140 presidentes, primeros ministros y reyes iniciaron el lunes en Nueva York la cumbre de tres días, que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, calificó de “extraordinaria” y “alentadora”.

Durante siglos la situación de los pobres del mundo había sido ignorada, pero en el comienzo del nuevo milenio los líderes mundiales se comprometieron a lidiar con la pobreza, las enfermedades, la ignorancia y la desigualdad.

Prometieron reducir a la mitad la pobreza extrema, asegurar que todos los niños tengan al menos educación primaria, detener y revertir la pandemia de VIH/sida, reducir en tres cuartas partes la mortalidad materna e infantil y a la mitad el número de gente sin acceso al agua potable e higiene básica, todo ello para el 2015. También fijaron objetivos para promover la igualdad de las mujeres, proteger el ambiente, aumentar la ayuda para el desarrollo y flexibilizar el sistema comercial y financiero mundial.

En anticipo de la cumbre, diplomáticos de los 192 estados miembros de la ONU convinieron el documento que será adoptado por los mandatarios, el que incluye acciones específicas para acelerar la implementación de cada uno de los ocho Objetivos para el Desarrollo en el Milenio en el próximo lustro.

“Estamos convencidos de que los Objetivos para el Desarrollo en el Milenio pueden cumplirse, incluso en los países más pobres, con un compromiso renovado, una implementación efectiva y una acción colectiva intensificada por parte de todos los estados miembros y otros participantes relevantes, tanto a nivel nacional como internacional”, dice el documento.

Muchos informes recientes muestran que los países más pobres, especialmente en el África subsahariana, han logrado pocos progresos para erradicar la pobreza. Y en África, Asia y Latinoamérica también ha habido una falta de progreso para reducir las muertes maternas e infantiles, suministrar agua potable e higiene y promover la igualdad de las mujeres.

viernes, 6 de agosto de 2010

Comprometido nuestro futuro

Comprometido nuestro futuro Por Yennifer Alvarez Jaimes EL VOCERO
Jueves 05 de Agosto de 2010 10:22

Mario Marazzi, director ejecutivo del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico, junto a Nayda Rivera, analista senior de investigación del Consejo Nacional de la Raza, desmenuzaron los hallazgos del estudio ‘2010 Kids Count Data Book'. EL VOCERO/Dennis Jones

El que más de la mitad de la niñez puertorriqueña viva en la pobreza es uno de los problemas más grandes que enfrenta la Isla y representa un reto para el futuro desarrollo económico y social del País.

Esa fue una de las conclusiones principales a la que llegó un grupo de expertos que evaluaron para EL VOCERO los hallazgos de un estudio sobre el bienestar de la niñez en Estados Unidos y Puerto Rico divulgado por la Fundación Annie Casey y el Consejo Nacional de la Raza, (NCLR, por sus siglas en inglés).

La tasa de pobreza infantil en Puerto Rico es de 56 por ciento; tres veces mayor que la de Estados Unidos. Además, 51por ciento de los niños viven con familias en que ninguno de los padres tiene empleo a tiempo completo durante todo el año.

El nivel de pobreza se rige por los ingresos anuales por debajo de $21,834 para una familia de dos adultos y dos niños.

El estudio ‘2010 Kids Count Data Book’ reveló que los niños puertorriqueños enfrentan mayores niveles de riesgo en nueve de los 10 indicadores de bienestar que precisamente están relacionados con el nivel de pobreza.

Entre los indicadores que reflejan niveles más altos en Puerto Rico que el promedio en Estados Unidos están: el nacimiento de bebés con bajo peso, el no trabajar ni estudiar durante la adolescencia (14 a 19 años) y el porcentaje de niños que viven con familias compuestas por un solo progenitor.

Sin datos no hay estrategia

Según Nayda Rivera, analista senior de investigación del NCLR, pSin embargo, Rivera indicó que el proceso de documentación debe ser un esfuerzo multisectorial y la responsabilidad no debe recaer sólo en el Estado.

Mario Marazzi, director ejecutivo del Instituto de Estadísticas de Puerto Rico, coincidió con Rivera y aseguró que es necesario que se conforme “un frente común” para poder tomar decisiones informadas.

“El no invertir para que estos asuntos tengan mejoría tendrá un impacto económico por mucho tiempo, ya que la niñez de hoy es la proyección de lo que será Puerto Rico en el futuro”, sentenció el también economista.

En cuanto a los indicadores relacionados con la salud, José Cordero, decano de la Escuela de Salud Pública del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico (UPR), sostuvo que el nacimiento de bebés con bajo peso tiene implicaciones a largo plazo para la productividad del País.
Cordero, quien además es presidente de la Academia de Pediatría de Puerto Rico, indicó que el nacimiento bajo peso pone en desventaja al niño en el desarrollo de sus habilidades intelectuales.

“Vemos un futuro bastante difícil. Porque de seguir la tendencia se reduce la posibilidad de que más estudiantes lleguen a la universidad”, aseguró el doctor.

Cordero destacó la necesidad de que se promueva la salud preventiva desde los niveles más tempranos del desarrollo. Indicó que se debe propiciar una alianza entre las instituciones que promueven la salud y las que impulsan la enseñanza para integrar más educadores en salud en las escuelas.

“Para prevenir la alta tasa de diabetes lo que necesitamos es educar desde temprano a los estudiantes y a los maestros. Incluir más actividades deportivas y sobre nutrición en los currículos escolares”, señaló.

Precisamente, el Departamento de Educación intentó reducir las plazas de maestros de Educación Física pero por orden del Tribunal se restituyeron. No obstante, la agencia eliminó cientos de plazas de maestros de salud a nivel elemental.

Modelo para combatir deserción

Por otro lado, para Guiomar García, directora de la Fundación Flamboyán, los indicadores socio educativos como la deserción escolar pueden mejorar si se evalúa y se documentan los esfuerzos exitosos de las organizaciones sin fines de lucro para reproducirlos en todo el País.

“Yo creo que como sociedad todavía no le hemos dado suficiente reconocimiento al trabajo que hacen las organizaciones sin fines de lucro. Como País hay que darle crédito, darle empuje y los recursos”, manifestó la educadora.

García agregó que hay que estimular el proceso de rendición de cuentas por parte de las propias organizaciones sin fines de lucro y entidades gubernamentales para propiciar “un proceso transparente” en donde sea vean las estadísticas y los estudios “como una oportunidad de mejorar y no como una amenaza” a la estabilidad laboral.

Un 15 por ciento de los adolescentes de 16 a 19 años no asisten a la escuela secundaria comparado con un 8 por ciento en Estados Unidos, según el ‘2010 Kids Count Data Book’.

viernes, 31 de julio de 2009

¿Qué pasará con los niños pobres de Puerto Rico?

viernes, 31 de julio de 2009
Bárbara J. Figueroa Rosa
Primera Hora

Luisito está en tercer grado y apenas sabe leer y escribir. Su madre, la jefa de la familia, no tiene tiempo para repasar sus tareas, pues tiene que atender a su hermanito y trabajar a tiempo parcial en un supermercado para llevar el pan a su casa. Luisito siempre anda limpiecito, pero en su casa no hay lujos. Tampoco pasa hambre, pero la mesada que llega a su hogar no alcanza para comer nutritivamente. Sin embargo, la mayor angustia de su mamá surge cuando él o su hermano se enferma, pues ninguno tiene seguro médico.

Luisito es un personaje ficticio, pero su historia simboliza la situación que atraviesan los 535,000 niños que actualmente viven bajo los niveles de pobreza en Puerto Rico, según el informe Kids Count 2009, publicado por la Fundación Annie E. Casey y el Consejo Nacional de La Raza, la organización hispana de derechos civiles y acción política más grande de los Estados Unidos.
Según los datos, la tasa de pobreza infantil en la Isla, donde se calcula que viven un millón de niños, es de un 55%, cerca de tres veces la de los Estados Unidos (18%). Esto quiere decir que residen en hogares donde hay un ingreso por debajo de los $21,000, en una familia de cuatro miembros.

La cifra es alarmante si se toma en consideración que este factor contribuye a que se desarrollen otros indicadores de riesgo que también fueron evaluados en el informe y en los que se destaca que el 15% de los adolescentes, entre los 16 y 19 años, opta por no asistir a la escuela ni trabajar. Otros datos ofrecidos apuntan también a que en nueve de los 10 indicadores claves para el bienestar de la niñez, los niños y adolescentes boricuas enfrentan niveles mayores de riesgo que en los 50 estados de Estados Unidos.

Y aunque la pobreza local es calificada como “urbana” y es distinta a la pobreza de miseria que enfrentan otros países como Haití, la situación es preocupante, en particular porque atenta contra el desarrollo de estos pequeños ciudadanos.

“Tal vez nuestros niños no se mueren de hambre, pero comen mal. Tienen la oportunidad de ir a la escuela, pero no aprenden destrezas básicas de lectura, escritura y aritmética. Y lo que es peor, si se enferman, no tienen seguro médico para curar sus males, pues en Puerto Rico sobre 500 mil personas carecen de plan médico”, reflexionó el sociólogo y salubrista Salvador Santiago.
De primera intención, no hay fórmulas mágicas para erradicar el problema, pero sí hay esperanza.

“Es cuestión de que haya una transformación social. Nos tenemos que mirar como sociedad y reinventarnos para asumir un rol en defensa de nuestro pueblo”, sugirió, por su parte, la secretaria del Departamento de la Familia, Yanitsia Irizarry.

Ambos coincidieron en que cualquiera que fuera el plan inicial debe alejarse de cualquier trivialidad política y concentrarse en el desarrollo de las familias como la institución más importante de la sociedad.