Pieza clave en el rompecabezas

Por Miguel Rivera Puig,

El joven Giovanny Mercado Lugo, una vez comparezca ante las autoridades será tratado como sospechoso por la muerte del joven Arístides (Ari) Vázquez Ortiz ocurrida en la habitación 552 del hotel La Concha, en el Condado, donde fue hallado el cadáver esposado y amordazado de la víctima junto a otro joven que tras ser agredido fue también amordazado y esposado.

El teniente Rolando Trinidad, director de la División de Homicidios del CIC de San Juan, quien ha estado buscando a Giovanny como “aguja en un pajar” desde la noche del lunes, dijo que era su responsabilidad detenerlo donde lo encuentre y que como sospechoso le tiene que hacer las advertencias de rigor, de que puede permanecer en silencio.
De esa forma Trinidad procuró echar a un lado las alegaciones de la abogada Mayra Enid López Mulero, de que la Policía había entorpecido sus gestiones para que Giovanny, vecino de Yauco y quien administra una cadena independiente de estaciones de gasolina se pueda comunicar con ella.
Anoche se esperaba que Giovanny compareciera de un momento a otro al CIC de San Juan o a la Fiscalía, para que una vez se le hicieran las advertencias, quedar en libertad.
El fiscal Francisco Rebollo y los investigadores de Homicidios habían entrevistados a diversos testigos, y hasta ayer el mas contundente lo haba sido Joshua Muñiz, el joven que resultó levemente herido tras ser golpeado, amordazado y esposado. Joshua supuestamente declaró que Giovanny haba llegado con tres individuos, dos de ellos con armas de fuego a la habitación en la tarde del lunes. En arrebato de coraje llamó a Joshua y Ari, que a penas se conocían, traidores.

Otro testigo, un joven peluquero llamado Erick y su mamá Yolanda, habían declarado ayer que compartieron en la habitación con Giovanny y otras cuatro personas hasta el jueves de la semana pasada. Giovanny enfureció y los botó a todos de la habitación alegando que le haban sacado $600 de una tarjeta de débito. Posteriormente Joshua regresó a la habitación en la que un grupo de jóvenes haban estado pernoctando desde el 9 de julio.
Se anticipa que con las declaraciones y una vez estén los hallazgos de la autopsia Giovanny podría ser acusado, aunque se espera que de un momento a otro se tengan todas las imágenes de las cámaras de seguridad del hotel, que hasta ayer no se habían producido, para corroborar las versiones de los testigos.
Los gastos del alquiler los pagaba Giovanny, según los testigos, entre ellos el travestí Alex Soto, quien también estuvo en la habitación entre el viernes y la mañana del lunes y no vio nada anormal.
Eirck y Yolanda no vieron a Soto, quien llegó al día siguiente de que ellos y un tal Cristian, entre otros huéspedes, fueran botados por Giovanny.
Independiente de que Giovanny decida declarar o no, la investigación irá también a sus finanzas, para saber cómo el joven gastaba dinero a manos llenas con sus amigos como si fuera un millonario.

Aunque se ha dicho que es el administrador de una cadena de estaciones de gasolina en Ponce, aparentemente no ocupa tal puesto y quizá sea un empleado más, según versiones que estaban siendo recibidas por los agentes, quienes tienen en agenda entrevistar al dueño de las gasolineras.