miércoles, 29 de junio de 2011

Se libra de la pena de muerte

Por Melissa Correa Velázquez,


Ángel Santana Espinet, uno de los tres acusados por asesinato durante un ‘carjacking’ de dos vigilantes del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), no se expondrá a la pena de muerte, ya que el Departamento de Justicia estadounidense notificó que no buscará la pena capital contra este imputado.


Los abogados de Santana Espinet, Steven Potolsky y José Aguayo, comparecieron a una audiencia ante la División de Pena de Muerte del Departamento de Justicia en Washington y luego de que el comité escuchara sus argumentos, determinó no buscar la pena de muerte.
Sin embargo, aún sigue expuesto al referido castigo Jonathan Ortiz Torres.


El tercer acusado, Leroy Rosado Santana no es elegible a la pena capital, según había informado el ex fiscal Antonio Bazán tras el arresto del trío. Éste enfrenta un cargo de posesión de un arma robada y de ayudar a los coacusados a no ser detenidos a sabiendas de que ambos cometieron un ‘carjacking’.


Rosado Santana y Santana Espinet se exponen a sentencias de cadena perpetua.


Se alega que el trío se reunió el 22 de marzo de 2010 para planificar el robo de las armas de fuego que estaban en posesión de los vigilantes del DRNA, Félix Rodríguez Gómez y Kenneth Omar Betancourt. Éstos llegaron en la noche a la sede de la agencia en un vehículo Mirage propiedad de Ortiz Torres. Una vez en el lugar comenzaron a vigilar a las víctimas, quienes se encontraban en sus puestos. Esta vigilancia se extendió por unas dos horas, hasta la madrugada del 23 de marzo. Mientras que Rosado Santana permaneció en el vehículo.


Tras observar a Rodríguez Gómez y a Betancourt, Ortiz Torres y Santana Espinet brincaron la verja de la agencia. Una vez en los predios esperaron unos 15 minutos, Betancourt comenzó a hacer las rondas y dejó solo en su puesto a Rodríguez Gómez. En momentos en que éste se encontraba solo, Ortiz Torres y Santana Espinet lo apuntaron con una pistola Smith & Wesson calibre 45. Rodríguez Gómez se cayó al piso.


Mientras, Betancourt detectó a los acusados y se movió al frente del puesto de vigilancia cerca de una gran piedra y comenzó a dispararles. Ortiz Torres fue herido en la pantorrilla. Durante el intercambio de disparos Betancourt cayó muerto y Ortiz Torres se le acercó para quitarle la pistola. Como Ortiz Torres no pudo encontrar la pistola, regresó a la caseta del guardia.


Luego de que Ortiz Torres resultara herido, él y Santana Espinet se dieron cuenta de que necesitaban un vehículo para escapar por lo que se robaron una Toyota Tacoma que estaba estacionada al lado del puesto de seguridad. Posteriormente, se encontraron con Rosado Santana y fueron a la casa de Ortiz Torres. En la mañana del 23 de marzo, los acusados fueron arrestados por agentes de la Policía de Puerto Rico, quienes allanaron el vehículo en el cual encontraron la pistola nueve milímetros que pertenecía a Rodríguez Gómez.
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