miércoles, 29 de junio de 2011

Delincuentes ya no respetan a nadie

por Maribel Hernández Pérez


El sentido de impunidad que tiene la nueva generación vinculada a la actividad delictiva del país ha provocado que se flexibilicen o simplemente no se reconozcan los “códigos de ética” establecidos por los grupos de crimen organizado o cuasi organizado.

El profesor de criminología de la Universidad Interamericana Julio Fontanet explicó ayer que el crimen de un niño de 11 años, a quien una pandilla de sicarios disparó con potentes rifles mientras se encontraba frente a la casa de familiares junto con sus hermanos y primos, refleja la tendencia que se ha arraigado en los últimos años.

“Ha habido una tendencia en los últimos años de que se ha flexibilizado tiene que ver con nuevas generaciones que ni siquiera hacen reconocimiento de los valores de estas culturas que hay que respetar”, dijo Fontanet en su análisis.

Insistió en que no solamente hay una percepción de impunidad entre esta generación, sino que los delincuentes están seguros de que, si cometen el delito, por la ineficiencia de la Policía no serán arrestados y acusados, y también están seguros de que la sociedad tampoco los rechazará.

En el pasado, los criminales no mataban a personas inocentes o ajenas a los actos delictivos en los que estaban involucrados y no se toleraba el abuso sexual contra los menores de edad.

“Tampoco existe ese rechazo social que existía en el pasado... el sentido de que puedo hacer lo que quiera sin consecuencias jurídicas o sociales”, argumentó Fontanet, tras resaltar que, en general, en el país existe una crisis de valores.

Por su parte, el ex superintendente de la Policía Miguel Pereira afirmó que nunca han existido los llamados códigos de honor entre criminales, aunque sí ha escuchado que pandillas han tomado acciones en contra de aquellos que han atentado contra inocentes.

“Eso es de Hollywood. Yo sé de algunos de ellos que vivían de tomar acción en contra de otros, si habían expuesto a civiles. Yo lo que he escuchado de personas durante deposiciones en las que se les preguntaba: ‘¿Por qué no aprovechaste esa ocasión para matarlo?’ Y decían: ‘Es que estaba con los nenes y yo no quería hacer eso’”, sostuvo Pereira.

Agregó que la alta oficialidad de la agencia ha demostrado su ignorancia para atender el problema delictivo del país.

La impunidad criminal se acrecienta, según indicó, ya que las autoridades no han demostrado que este tipo de conducta sea severamente castigada.

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