Terrible fin para un bebé

07 Febrero 2011

Terrible fin para un bebé
Según la Policía, la madre confesó que lo mató a golpes. Fotos

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Zuleyka Fortis Martínez, de 26 años, le permitió a su novio, Edelmiro Colón, que le pusiera sus apellidos al bebé, aunque ambos sabían que él no es el padre biológico, según relataron ambos a la Policía. (El Nuevo Día / José R. Mader)Por Eugenio Hopgood Dávila / ehopgood@elnuevodia.com

Tras una noche y un día de intensos interrogatorios Zuleyka Fortis Martínez, finalmente, admitió que era falsa su versión de que su compañero había asesinado a su hijo de tres meses con un bate de aluminio y confesó que fue ella quien lo mató con sus puños.

Así lo informó la oficial Emily Rodríguez, directora de prensa de la Policía en la Región de Caguas anoche, mientras Fortis Martínez se encontraba en vías de juramentar su declaración inculpatoria ante el fiscal de Distrito de Caguas, José Capó, y los fiscales Miguel Colón y Maribel Mojica.

Se esperaba que en algún momento entre anoche y la mañana de hoy se le sometieran cargos a la mujer de 26 años por el asesinato del bebé Pedro Colón Fortis, nacido hace apenas tres meses.

Ayer, Zuleyka estuvo detenida en el cuartel de Gurabo indicando que su pareja, Edelmiro Colón Marrero, había golpeado a su bebé con un bate de aluminio, mientras que el joven estaba en la comandancia de Caguas alegando que ella era la culpable.

La oficial Rodríguez indicó que ninguno de los dos había solicitado la representación de abogado mientras eran entrevistados.

Agredido tras discusión

Según lo confesado por Zuleyka, el miércoles pasado tras sostener una fuerte discusión con Edelmiro éste se marchó de la casa que compartían en la comunidad Mariolga de Caguas, y ella, en medio de su furia, le dio dos puños en la cabeza al bebé de tres meses, informó Rodríguez.

El jueves por la mañana el bebé se despertó “contento”, según la madre pero luego comenzó a mostrar problemas para respirar.

Tras intentar varios remedios caseros la mujer llamó al 9-1-1 y los paramédicos que respondieron decidieron llevarse al niño al hospital HIMA de Caguas, adonde llegó a las 10:30 a.m.

Cuatro horas más tarde, el bebé fue declarado muerto y aparentemente las señales de violencia no eran tan evidentes, por lo que se indicó preliminarmente que había sufrido un “paro respiratorio”. La madre no fue al hospital, aduciendo que tenía que cuidar a su otra hija menor, dijo Rodríguez.

La autopsia la delató

No obstante, el fiscal Miguel Colón ordenó hacerle la autopsia que fue practicada por el patólogo forense Edwin Chávez y se determinó el sábado que la muerte se produjo por un golpe contundente en el cráneo. También se reflejaron “golpes viejos” en las costillas del pequeño. Ayer la madre admitió que ella fue quien le propinó esos golpes.

Al recibirse los resultados, los fiscales obtuvieron una orden de allanamiento y entraron a la casa donde hallaron a Zuleyka llorosa en el único cuarto y agarraron a Edelmiro mientras brincaba una verja para huir por el monte, lo que levantó sospechas en su contra.

Luego Edelmiro explicó que entró en pánico cuando vio a la Policía entrar por la fuerza a la casa, debido a que un primo suyo fue asesinado en Juncos por sujetos con uniformes de policías, los cuales, según la Policía, eran matones disfrazados de agentes, y él pensó que iba a correr la misma suerte. De hecho, no se ha informado que se ocuparan drogas, armas ni nada ilegal en la casa.

Fuentes de la Policía informaron el sábado incorrectamente que Edelmiro había confesado los hechos. El hombre dijo ayer que lo único que admitió es que el niño había sido golpeado, pero que no había sido él.

Nunca quiso al niño

Edelmiro dijo a los fiscales y a los agentes investigadores Luis Rodríguez y Wanda Correa que Zuleyka nunca quiso al bebé y que incluso, cuando estaba embarazada, se golpeaba el vientre intentando abortarlo.

El hombre indicó que, aunque figura legalmente como padre, el bebé no era su hijo biológico y él aceptó “apuntarlo” a su nombre.

Se informó que incluso ese hecho fue corroborado por Zuleyka ayer a los agentes que la interrogaron.

Otra hija menor de Zuleyka fue removida de la residencia por el Departamento de la Familia, según informó la secretaria Yanitsia Irizarry.

De acuerdo con el supervisor de Homicidios del CIC de Caguas, el sargento David Correa, las condiciones de la residencia “no eran las mejores”, ya que había “malos olores, cucarachas y suciedad”.