miércoles, 2 de febrero de 2011

No convence la oferta Mi Salud

02 Febrero 2011

No convence la oferta de Mi Salud a los empleados públicos
Persiste una imagen negativa de los servicios ofrecidos



Trescientos once empleados públicos, de unos 200,000, se suscribieron a Mi Salud. (Archivo )Por Marga Parés Arroyo / Mpares@elnuevodia.com

La percepción negativa, la poca oferta de especialistas y la limitada aceptación de su cubierta son algunas de las razones para la poca acogida que tuvo Mi Salud entre los empleados del Gobierno de Puerto Rico.

La cifra oficial ofrecida ayer sobre los empleados que se suscribieron al plan de salud del Gobierno indican que menos de uno por ciento de los empleados públicos (0.15%) del País optaron por escoger a Mi Salud, producto que, por primera vez, está disponible de forma masiva para otros sectores, como los empleados municipales, de corporaciones públicas y de pequeños y medianos negocios.

En esta primera fase de suscripción, sólo unos 311 empleados gubernamentales -de un universo de unos 200,000- ingresaron al Plan de Salud del Gobierno (PSG). La mayoría (211) se suscribió a la aseguradora Humana, mientras el resto (unos 100) se afilió a MCS, otra compañía que corre la cubierta física.

Poco atractivo

Para Sandra Estada, portavoz de Humana, un aspecto que pudo perjudicar el ingreso a Mi Salud en este primer sector es la “percepción negativa” que, según se alega, se le atribuye al PSG.

“De primera intención no lo vas a tener (una suscripción masiva) porque hay una percepción errónea, una percepción negativa que lleva más de quince años, desde que inició la Reforma (de Salud)”, sostuvo Estada.

Según comentó, la confianza del público al producto de Mi Salud “va a tomar más tiempo”.

“Todavía hace falta un poco más de educación”, dijo.

Sin embargo, opinó que otro punto que pudo afectar la acogida de los empleados públicos pudo ser la formación de las redes preferidas y “que no todos los médicos cogen Mi Salud”.

Annette González, presidenta del Concilio 95 de los Servidores Públicos Unidos, coincidió en que la cantidad de proveedores contratados para cubrir el PSG es “muy poco” en comparación con otras ofertas comerciales.

Según González, un aspecto disuasivo es las diferencias de tarifas en las regiones, lo que, según dijo, provoca que muchos médicos no quieran entrar a Mi Salud.

Agregó que la exigencia de que los médicos primarios estén en un horario hasta las 9:00 p.m. es un aspecto beneficioso para los asegurados, “pero hace que muchos médicos no quieran entrar (a Mi Salud)”.

“La verdad es que no son unos beneficios llamativos”, dijo en comparación con otros planes privados.

Según comentó, uno de los puntos menos atractivos para ella es que, con una matrícula de unos 15,000 a 18,000 unionados de doce agencias de gobierno dispersos por toda la Isla era difícil tener diferentes tarifas por regiones.

“Ahora mismo tengo unas tarifas para todo el mundo y procuro tener muchos proveedores porque mi matrícula está por todo el País”, dijo.

Federico Torres Montalvo, de la Coordinadora Unitaria de Trabajadores del Estado, comentó que la cubierta de Mi Salud no era más económica que otras.

“Aunque parecería que sí, el problema es que el costo era básicamente lo mismo porque, con los ingresos de los empleados públicos, se convertía en básicamente la misma tarifa que un plan comercial”, dijo.

Agregó que otro agravante es la exigencia de tener que pedirle un referido al médico primario si el especialista que quiere visitar el asegurado no está en la red preferida de su grupo médico.

“Eso es un agravante de mucho peso porque la gente no acepta cambiar de un médico al que lleva visitando ocho o diez años”, dijo.

Los empleados públicos tienen derecho a ingresar a Mi Salud, pero no de forma gratuita. La aportación patronal pasa a la Administración de Seguros de Salud (Ases) y el empleado paga la diferencia, dependiendo del precio de la prima en su región.

Las expectativas eran altas

El primer empleado público en adquirir la tarjeta de Mi Salud fue el secretario de Salud, Lorenzo González, quien en un acto simbólico la recibió de manos del gobernador Luis Fortuño en la primera actividad masiva de orientación, a principios de septiembre del año pasado.

“Con Mi Salud ya estamos cubriendo a la población de médico indigentes. Vamos a estar ampliando -comenzando el año que viene (2011)- esa cubierta a más personas, pero queremos también cubrir a todos los empleados públicos”, advirtió Fortuño el año pasado.

Los próximos en ingresar serán los empleados municipales.

Algunas razones para la poca acogida a Mi Salud

Percepción negativa de la cubierta del Plan de Salud del Gobierno.


Falta de orientación sobre nuevos beneficios.


La cantidad de médicos fuera de las redes generales y preferidas contratadas por las aseguradoras (MCS y Humana).


La restricción de sólo tener acceso a los médicos contratados en la región del asegurado.


Diferencias en las tarifas a los proveedores hace que muchos médicos no quieran darle servicio a este plan.


Los beneficios no resultan llamativos, en comparación con la oferta de otros planes comerciales.


La prima no es más económica que otras en el mercado de planes comerciales.


El requisito de tener que pedir referido del médico primario si el médico que quiere visitar el asegurado no es parte de la red preferida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario