Amplio rechazo cívico y comunal al gasoducto

17 Octubre 2010

Amplio rechazo cívico y comunal al gasoducto
Las vistas de ayer fueron el único espacio que tuvo la ciudadanía general para expresarse sobre el proyecto. Vídeo

Le dan F al estudio del gasoducto
El público participó de manera entusiasta en las vistas celebradas ayer en Adjuntas. (el nuevo dia/jorge a. ramirez portela)Por Gloria Ruiz Kuilan / gruiz@elnuevodia.com

ADJUNTAS – Los planteamientos en oposición dominaron ayer las primeras y únicas vistas públicas sobre el gasoducto del norte, que contaron con la participación de decenas de personas -algunas de ellas en representación de organizaciones cívicas y comunales.

Las vistas fueron simultáneas en los pueblos de Bayamón, Barceloneta y Adjuntas. En este último, la Junta de Calidad Ambiental (JCA) realizó las vistas en la antigua escuela José Julián Acosta que ahora albergan a la Legislatura Municipal. Justo al frente de este edificio, Casa Pueblo efectuó vistas públicas de manera paralela, principalmente para repudiar la limitación de participación ciudadana en este proyecto. La JCA limitó a quince minutos la ponencia de cada participante ante el oficial examinador, Fernando Olivero Barreto.

El primero en deponer lo fue el agricultor Luis Ramos Santiago, quien se opuso al proyecto. Le siguió el ingeniero y asesor de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), Daniel Pagán, quien recibió de manera directa muchas de las críticas esbozadas por los deponentes.

Pagán y el asesor de la Comisión de Servicio Público (CSP), Nelson Torres -portavoces de agencias de gobierno- fueron los únicos que avalaron el gasoducto. Torres aseguró en su ponencia que la AEE “cumple con los requisitos de diseño y construcción para asegurar la seguridad de las líneas soterradas” conforme a las regulaciones de la CSP.

Al concluir su ponencia, el oficial examinador de la JCA comentó que esperaba que el documento presentado por la CSP hubiese contenido “aspectos de seguridad” sobre todo por los accidentes con gas que han trascendido públicamente.

La mayoría de los deponentes se opuso al proyecto aduciendo que es dañino al ambiente, conlleva un riesgo muy alto a la seguridad de vidas, violenta la misma política pública ambiental vigente y se ha trabajado con celeridad, atropellando la participación ciudadana. Además, se criticó insistentemente la Declaración de Impacto Ambiental Preliminar (DIA P) presentada para el proyecto por supuestamente tener errores y serias deficiencias.

Las vistas también fueron el foro que utilizaron los deponentes para quejarse contra el gobernador Luis Fortuño por establecer mediante una orden ejecutiva una emergencia energética “que no existe” para analizar el proyecto de manera expedita.

Precisamente, la planificadora ambiental Carmen Guerrero hizo trizas la orden ejecutiva del Gobernador al citar la Ley 76 del 5 de mayo de 2000, que establece que ese recurso sólo será viable ante desastres como maremotos, ataque de fuerzas enemigas o erupción volcánica. Guerrero también calificó la DIA P como “sumamente mediocre” por lo que pidió sea retirada.

Igualmente, el profesor Iván Baigés, en representación del Instituto Tropical de Energía, Ambiente y Sociedad del Recinto Universitario de Mayagüez, cuestionó la DIA P porque, entre otras cosas, considera erróneamente la generación de energía con basura como una renovable, ni da detalles precisos del impacto ambiental del proyecto o de su costo total.

“La DIA dice que 150 pies de ancho serán impactados para colocar los tubos. Eso es devastar un área. Le exhortamos a que escuchen al pueblo. El pueblo se va a levantar. Esto no tiene sentido que no sea pescar votos o ayudar a amigos ricos”, dijo por su parte el profesor de ingeniería eléctrica del Recinto Universitario de Mayagüez, Gerson Beauchamp.

El profesor de matemáticas José González Díaz manifestó su preocupación por el impacto negativo del gasoducto a la flora y la fauna al atravesar zonas en donde habitan especies en peligro de extinción como la cotorra puertorriqueña, el guabairo, el guaraguao y el halcón peregrino.

Residentes del barrio Tallaboa Encarnación de Peñuelas y del barrio Portugués también participaron de las vistas para denunciar el comienzo del proceso de expropiación y el efecto nefasto en el estado anímico de los residentes, muchos de ellos ancianos.

Una de las ponencias que más provocó la anuencia del público con aplausos y vítores fue la de Arturo Massol. Explicó que sólo la tubería para construir el gasoducto costará a la AEE $500 millones gracias a una emisión de bonos que calculó le costará al pueblo entre $58 a $62 millones anuales. Massol explicó que dicha cifra contrasta con los $54 millones que asegura la AEE se ahorrará el pueblo por combustible anualmente.

La portavoz del Frente Amplio Contra el Gasoducto, Yanina Moreno, dijo que el gasoducto en vez de generar ahorros en energía para el pueblo será una deuda porque la inversión que hará EcoEléctrica motivada por el gasoducto será “transferida a los abonados de la AEE”. Además, explicó que el gasoducto no puede verse como un simple proyecto sino como la “gasificación” del país.

El oficial examinador de la JCA preguntó sobre ese particular a Jaime Sanabria, portavoz de EcoEléctrica, quien refirió la pregunta a la AEE, pero se vio obligado a contestar cuando se le insistió.