Una tendencia funesta

30 Julio 2010

Una tendencia funesta
Van siete asesinatos de homosexuales en los últimos nueve meses



El asesinato de Juan Antonio Santiago (‘Ashley’) en abril consternó a Corozal.Por Ricardo Cortés Chico / rcortes@elnuevodia.com

Siete asesinatos contra homosexuales ocurridos en los últimos nueve meses han alzado la voz de alerta en cuanto a la posibilidad de que algunos de éstos pudiera tratarse de algún crimen de odio por la orientación sexual de las víctimas.

Tres de estos casos ya fueron resueltos por las autoridades. El más reciente fue el del estilista transexual Juan Antonio Santiago, mejor conocido como “Ashley”, cuyo asesino, identificado por la Policía como Emmanuel “Mangüi” Adorno Ayala, de 22 años, confesó el crimen a las autoridades a finales de mayo.

Actualmente, la Policía mantiene pesquisas abiertas por los asesinatos de Michael “Michell” Gallino Rullier ocurrido en San Juan, Ángel “Angie” González Oquendo en Caguas, Humberto Bonilla Rodríguez en Rincón y Juan Carlos Crespo Molina en Loíza.

Este último caso, ocurrido el 7 de julio, inicialmente fue un dolor de cabeza para las autoridades debido a que no se encontraron personas que identificaran al occiso. Según el agente Miguel Álvarez, de la División de Homicidios de la Policía en la región de Carolina, la identificación se logró comparando las huellas dactilares con la base de datos del Servicio Federal de Inmigración y Aduana (ICE, por sus siglas en inglés).

Aparentemente Crespo Molina había sido fichado en varias ocasiones en el estado de la Florida y procesado por prostitución.

Según el activista a favor de los derechos de las personas homosexuales, Pedro Julio Serrano, esta última muerte marca una tendencia de crímenes contra personas gay o transexuales que no se había visto desde los tiempos de Ángel Colón Maldonado, el llamado “Ángel de los solteros”, a quien se le atribuye más de 20 muertes de personas por su preferencia sexual en los años 1980.

De acuerdo con Álvarez, por el momento, la teoría principal del asesinato de Crespo Molina, es que el transexual fue víctima de un robo. Su cuerpo tenía impactos de bala en el pecho, la espalda y un brazo, llevaba puesta una peluca y ropa interior de mujer.

Ayer, todavía las autoridades buscaban la pareja del asesinado, familiares o conocidos, especialmente en el área de Santurce, donde se cree que Crespo Molina solía prostituirse.

En el caso del transexual Ángel “Angie” González Oquendo, asesinado a finales de mayo en un apartamento en la calle Ponce de León en Caguas, todavía “se está buscando información”, dijo el jefe de investigaciones criminales de la Policía en Caguas, William Ruiz Borrás.

Recientemente, la pareja del transexual, que no fue identificada, se descartó como sospechoso en el caso. El cuerpo de Angie fue hallado en el suelo del apartamento, completamente desnudo con heridas “punzantes o cortantes” en el cuello y el pecho, por lo que no se descartaba que se tratara, en efecto, de un crimen de odio.

En una situación similar se encuentra la investigación de la muerte de Michael Gallino Rullier. Según Luis Torres Soto, agente investigador del caso, todavía están concentrados en la recopilación de evidencia. Explicó que todavía no tienen un sospechoso claro del asesinato. No obstante, tienen “una buena idea de lo sucedido”. El cadáver de Gallino Rullier fue hallado en la Pocita en el Condado con heridas punzantes en varias partes de su cuerpo.

En torno a la muerte de Humberto Bonilla Rodríguez en Rincón, la agente Adaliz Rosario, de la División de Homicidios de Aguadilla indicó que esperan por el protocolo de autopsia para investigar formalmente el caso como un asesinato. Este informe fue enviado el 10 de junio a la fiscalía de Aguadilla, trascendió.

“Es preocupante que ante todos estos crímenes no haya todavía una acción decidida de las autoridades para detener esto”, dijo Serrano.

El asesinato de Fernando Vargas López de Victoria, de 38 años, ocurrida en el motel Las Colinas en Ponce fue esclarecido el 19 de diciembre, tres días después de los hechos. Esto luego que Luis Díaz Rodríguez, de 34 años, confesara el crimen.

El otro asesinato esclarecido es el de Jorge Steven López Mercado. Por este crimen, Juan José “Casper” Martínez se declaró culpable por lo que fue sentenciado a una cadena perpetua.