08 Julio 2010
Una agente de la Policía que comenzaba su día y un bibliotecario que regresaba a su casa fueron asesinados ayer de madrugada al caer en medio del fuego cruzado de una batalla entre delincuentes mientras transitaban por el expreso de Trujillo Alto.
La información recopilada hasta el momento apunta a un enfrentamiento entre maleantes del residencial Jardines del Paraíso, inmediatamente al oeste del expreso, y gatilleros vinculados al residencial Las Dalias, ubicado a varias cuadras hacia el este de dicha vía.
El director del Cuerpo de Investigaciones Criminales de San Juan, Pedro Sánchez, reportó que no se había reportado ningún muerto ni herido sospechoso de haber participado en la balacera.
Eran cerca de las 3:50 a.m. cuando la agente Blanca de los Santos Barbosa, de 37 años transitaba en su guagua Vitara en dirección de Trujillo Alto a Río Piedras rumbo al cuartel de Hato Rey Oeste, donde laboraba, informó el coronel Miguel Mejías, director de la Región policial de San Juan.
Manuel Medina Rivera, de 32 años y padre de dos niños, bibliotecario del MBTI College en Santurce, regresaba a su casa en la urbanización Metrópolis en Carolina en su Toyota verde. Acababa de bajar del elevado que cruza la avenida 65 de Infantería, en dirección a Trujillo Alto cuando fue alcanzado por los disparos, según la Policía.
La mayor cantidad de disparos fueron hechos desde las esquinas de la marginal al este del expreso con las calles Trebi y Treviso de Villa Capri. Más de 200 casquillos de bala de rifles AK-47 y AR-15, así como de pistolas .40 y .45 fueron recuperados en esos dos puntos, indicó Mejías.
Armando el rompecabezas
Por la tarde, los agentes descubrieron cerca de cincuenta casquillos de bala entre los edificios 34 y 39 de Jardines del Paraíso, informó Sánchez.
“Estamos armando el rompecabezas... la escena es compatible con una balacera entre personas en las esquinas de la marginal y otras en Jardines del Paraíso, aunque no podemos establecerlo así todavía”, dijo el jefe del CIC.
Una de las balas entró por la puerta del pasajero de la Vitara de De los Santos, atravesó su brazo derecho y entró por el costado. La Vitara quedó justo antes del elevado. La agente murió a las 8:30 a.m. en el Centro Médico.
Medina fue alcanzado por una bala en el pecho y otra en la espalda. Perdió el control y el carro subió la isleta central y quedó al lado contrario del expreso.
“Tenemos un patrullaje intensivo aquí las 24 horas, pero esta gente aprovechan la menor oportunidad, las 3:50 a.m. hora del cambio de turno (en los cuarteles), entiendo que aprovecharon eso”, dijo Mejías.
Hace dos semanas nos llevamos más de 70 personas en (el residencial) San Martín, aquí cerca, pero estos tipos, cada vez salen más, se multiplican”, dijo.
El doble crimen ocurre al día siguiente de que el gobernador Luis Fortuño y el jefe de la Policía José Figueroa Sancha indicaran que la criminalidad ha bajado y las calles están más seguras.
“Me despertaron los tiros, duró como cinco minutos”, dijo el vecino del área Manuel Mena. “Casi todos los días hay tiroteos aquí, pero desde hace unos cinco meses se ha puesto peor y ¿dónde está la Policía?, No llegan”, agregó.
“Esto es increíble”
“Él era un hombre tranquilo, ejemplar, no se puede decir nada malo de él, esto es increíble”, dijo angustiado Jorge Medina, hermano del hombre asesinado.
“Él seguía siendo el mejor papá del mundo, no tenía quejas de él. Estoy preocupada por los niños porque hay que ver como darle esa noticia a los chiquitines, no va a ser fácil, son locos con su papá”, dijo con tristeza Beatriz Arroyo, ex esposa de Medina y madre de un varón de cinco años y una niña de ocho.
“Esta guerra tiene que parar, son muchachitos que están sueltos porque no investigan bien.. ya han pasado otros incidentes así, siguen saliendo a disparar y siguen matando más gente”, sostuvo el hermano.
El fiscal federal Antonio R. Bazán acudió a la escena, pero ayer no se sabía aún si los federales asumirían jurisdicción.
El portavoz del FBI, Tommy Ortiz, dijo que lo que daría injerencia federal es una ley que penaliza los asesinatos cometidos desde un carro en movimiento motivados por tráfico de drogas.
“Estamos ayudando a la policía y recuperando inteligencia para ver si llena los elementos para asumir jurisdicción”, dijo Ortiz.
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