Vigilantes ante un posible desalojo en la UPR

Vigilantes ante un posible desalojo en la UPR
La Administración se reitera en que no usará la fuerza
7 de junio de 2010



Los estudiantes universitarios dijeron presente durante la Marcha de Orgullo Gay que se celebró ayer. Por Camile Roldán Soto / end.croldan@elnuevodia.com

Al cumplirse hoy el plazo dado por la administración universitaria a los huelguistas para que los portones del recinto riopedrense de la Universidad de Puerto Rico (UPR) amanecieran abiertos, los estudiantes se preparaban para enfrentar un posible desalojo.

Ayer, desde muy temprano, cobraron fuerza los rumores iniciados hace varios días sobre la posibilidad de un desalojo forzoso, tras circular un comunicado de prensa de la Federación Universitaria Pro Independencia (FUPI) en el que señalaban a la compañía de seguridad privada Capitol Security como la encargada de abrir los portones.

“Según la información revelada por nuestras fuentes, el gobierno no quiere ensuciarse las manos con un desalojo en la Universidad y para esto han contratado a Capitol Security”, lee el comunicado de la FUPI.

“Los preparativos para el operativo de desalojo incluyen la compra de escudos, macanas, pistolas ‘taser’ y armas de fuego, además de la movilización de guardias desde el área oeste y otros puntos de la Isla hasta Río Piedras”, se señala.

Los miembros de la administración de la Universidad no estuvieron ayer disponibles para reaccionar sobre el particular. Sin embargo el portavoz de la presidencia, Iván Ríos, se reiteró en que “eso el Presidente (José Ramón de la Torre) lo ha aclarado y la Rectora lo ha reiterado”. Éste se refería a declaraciones de ambos funcionarios en contra de utilizar a la Policía.

Por su parte, la presidenta de la Junta de Síndicos de la UPR, Ygrí Rivera, ha negado en reiteradas ocasiones que se considere utilizar la Fuerza de Choque para acabar con la huelga o que se vaya a cerrar el recinto hasta diciembre, como también se ha rumorado.

Ayer se supo que la guardia universitaria del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) fue relevada de sus funciones el sábado, a las 9:00 p.m., lo que levantó suspicacia entre el estudiantado, confirmó Armando Esteves, representante estudiantil ante la Junta Universitaria.

En el recinto, señaló, los huelguistas han tomado medidas preventivas como la colocación de barricadas y cámaras para documentar las acciones en los portones.

Continúa la negociación

En medio de la incertidumbre que impera entre los huelguistas, el estudiante Giovanni Roberto, miembro del Comité Negociador Nacional estudiantil (CNN), aseguró que confía en que hoy continúen las negociaciones a partir de las 2:00 p.m.

Señaló que, de todos los escenarios posibles, el de un desalojo sería el más remoto. Pero aseguró que, de ocurrir, el plan del estudiantado se implementaría y se conocería en ese momento.

“No esperamos un escenario violento en los portones. Nos parecería un error grave”, sostuvo Roberto.

La presencia de la Policía en el Recinto de Río Piedras tiene su antecedente desgraciado más recordado en la huelga del 1971, cuando los tiros de efectivos de la Fuerza de Choque dieron muerte a la estudiante Antonia Martínez Lagares.

“Intentar desalojar el Recinto de Río Piedras o cualquier Recinto de la Universidad podría convertirse en una situación grave y trágica para el País”, manifestó, por su parte, la FUPI.

En cuanto a la negociación, se espera que los puntos a discutirse hoy sean las sanciones a los estudiantes y la llamada cuota especial que se impondría a partir de agosto a todos los alumnos.

El estudiantado rechaza la imposición de la cuota y solicitan que la administración desista de presentar sanciones contra los huelguistas.

Antes de imponer la cuota propuesta por la administración, la cual pudiera ascender a $1,000 durante los próximos tres años, el CNN reclama que se realicen estudios económicos y se consulte con la comunidad universitaria en busca de otras opciones.

“No nos queremos levantar (de la mesa de negociación) sin saber que al menos en el (próximo) semestre no se implementará la cuota, en lo que se pueden generar debates que resuelvan los problemas de presupuesto”, señaló Roberto.

“Lo que le pedimos (a la administración) es que mañana regresen a la mesa con el sentido de urgencia que nosotros sí sentimos para que termine el proceso lo antes posible”, subrayó.

El informe del obispo

Sobre el posible desalojo en la UPR, el obispo David Álvarez no quiso hacer comentarios, tras ser consultado vía correo electrónico.

Lamentó no poder hacer expresiones públicas debido a su rol de mediador, el que “traté de realizar sin éxito”, indicó Álvarez.

Agregó que ya envió su informe al gobernador Luis Fortuño; al presidente de la UPR, José Ramón de la Torre; y a la presidenta de la Junta de Síndicos, Ygrí Rivera. “Les toca a ellos hacer expresiones sobre el mismo”, concluyó el Obispo.