lunes, 31 de mayo de 2010

Se entrega tras intentar quemar viva a su suegra

Se entrega tras intentar quemar viva a su suegra
Salen ilesos los tres hijos del atacante

31 de mayo de 2010

La casa de Juanita Pérez Díaz, de 54 años de edad, sufrió serios daños durante el siniestro.Por Eugenio Hopgood Dávila / ehopgood@elnuevodia.com

El hombre que le prendió fuego a la casa de su suegra con ella y los tres hijos de él adentro se entregó ayer por la tarde a la Policía en Coamo después de permanecer escondido por más de veinte horas, informó la Policía.

William A. Rodríguez Vázquez, un maestro de escuela, de 37 años de edad, se entregó junto a un abogado y estaba pendiente de radicación de cargos temprano anoche mientras agentes del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Coamo y personal de la fiscalía de Aibonito investigaban y evaluaban la prueba, informó el sargento Héctor González.

La situación comenzó el viernes por la noche poco después de las 8:00 p.m. cuando surgió una discusión entre Rodríguez Vázquez y su esposa, la también maestra Melitza Vázquez, en la casa de la familia en la urbanización Mountain View de Coamo, según informó la Policía.

La discusión entre la pareja se desarrolló en presencia de sus tres hijos, de 8, 9 y 10 años de edad, y de la abuela materna, Juanita Pérez Díaz, de 54 años, dijo la Policía.

En un momento dado, el hombre se tornó amenazante, la esposa temió por su seguridad y la de sus hijos y se marchó de la casa con los niños y la abuela, dijo González. Vázquez dejó a sus hijos con la abuela en la casa de ésta, ubicada en la urbanización Colinas de Coamo y se fue al cuartel de la Policía para presentar una querella por violencia doméstica, se informó.

Rodríguez Vázquez se presentó iracundo a la casa de su suegra y roció un acelerante por la sala y por el cuerpo de la señora, quien logró salir corriendo de la casa con sus nietos mientras el hombre le pegaba fuego a la casa, según informó la Policía.

La casa sufrió daños severos por las llamas y el humo, dijo González, aunque no había estimado de la cuantía de estos daños anoche.

González confirmó que la abuela sufrió una crisis nerviosa y fue atendida en el Hospital Menonita, pero ya en la tarde había sido dada de alta. La mujer presentaba ardor en la piel, pero aparentemente se debe al acelerante que su yerno le lanzó encima ya que no fue alcanzada por llamas.

En buen estado los niños

Afortunadamente los tres niños salieron físicamente ilesos del violento incidente. La esposa y los menores estuvieron durante el día bajo la protección de la Policía mientras aún era incierto el paradero de Rodríguez Vázquez.

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