miércoles, 19 de mayo de 2010

Más despidos en el Departamento de Salud

Más despidos en el Departamento de Salud
Actualmente el personal de enfermería tiene a cargo algunas de las funciones de los empleados cesanteados. Lorenzo González sostuvo que, a pesar de estos despidos, “ninguno de los programas federales se verán afectados”. (Archivo )
miércoles, 19 de mayo de 2010
Francisco Rodríguez-Burns / Primera Hora
Las cesantías en el Gobierno parecen ser el cuento de nunca acabar. Cerca de 200 empleados de Salud culminarán sus funciones en la agencia antes de que finalice el mes como parte del plan de reestructuración gubernamental que ha conllevado el despido de más de 20,000 empleados públicos.

Aunque algunas versiones extraoficiales apuntan a que los despidos han puesto en jaque varios programas que procuran la obtención de fondos federales en Salud, el Gobierno asegura que se han implantado medidas preventivas para asegurar la estabilidad de las operaciones de las oficinas que manejan asuntos tan sensitivos como la vacunación, la bioseguridad y la salud ambiental. Se estima que cerca de dos terceras partes de los fondos de la agencia provienen del Gobierno federal.

“Esto no es nada distinto de lo que ha pasado en Puerto Rico durante los últimos 12 meses. Resulta difícil porque las personas pierden sus empleos, pero ninguno de los programas federales se verán afectados”, sostuvo el secretario de Salud, Lorenzo González.

Sostuvo el funcionario que todos los empleados con 13 años y medio de servicio en el Gobierno que no proveen servicios directos a la ciudadanía fueron evaluados para las cesantías que entrarán en vigor este mes y subrayó que la agencia retuvo trabajadores que podían ser despedidos al realizar un análisis de sus funciones. Por ejemplo, la agencia no cesanteó 25 de 31 cobradores que pudieron haber sido despedidos bajo los parámetros legales de la Ley 7, la cual facultó el polémico plan de cesantías.

Pero, según asegura la Unión General de Trabajadores (UGT), los despidos sí inciden indirectamente en los servicios de los pacientes. Entre los empleados cesanteados figuran 56 trabajadores del Hospital Universitario y 60 del Hospital Pediátrico del Centro Médico. Gran parte del personal administrativo se responsabilizaba por el cobro de servicios y otros asuntos relacionados con la cita de los pacientes y sus récords médicos.

El personal de enfermería actualmente tiene a cargo algunas de estas funciones debido a que la gran mayoría de los empleados cesanteados están agotando sus días de vacaciones antes de que entre en vigor su despido el 31 de mayo.

“Todo tiene que estar al día y nosotros no tenemos el tiempo para ocuparnos de estas tareas”, sostuvo una enfermera de cabecera mientras salía de su turno de trabajo en el Universitario. Según datos ofrecidos por la UGT, la última ronda de cesantías en Salud terminó con el despido de otros trabajadores que ocupan puestos sensitivos como analistas de personal y técnicos de facturación.

Salud resultó ser una de las agencias más perjudicadas por el plan de cesantías. Se estima que su personal se ha recortado desde un 15 hasta un 20 por ciento, de 9,000 a 7,800 empleados. Pero algunos críticos de los recortes aseguran que la agencia está afectando divisiones neurálgicas que obtienen importantes asignaciones federales, incluso para tratar a los pacientes de sida y financiar los servicios que reciben los pacientes de Medicaid.

Según algunos estimados, las asignaciones del Gobierno federal sobrepasan los $1,000 millones. También se asegura que la agencia podría realizar recortes significativos mediante una reorganización de las instituciones sanitarias bajo su administración. Por otro lado, Salud asegura que cada división de la dependencia recibió un plan detallado para prevenir contratiempos en el recorte de personal.

“Estamos al tanto de lo que está pasando administrativamente. Tenemos que ser más eficientes y tenemos que mejorar la infraestructura” , concluyó el Secretario.

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