Funerales virtuales

lunes, 1 de febrero de 2010
Bárbara J. Figueroa Rosa
Primera Hora

Cuando murió don José, muchos de sus amigos, radicados en Nueva York, lamentaron no poder darle el último adiós porque se encontraban fuera del país. En cambio, el asunto se resolvió con un solo clic cuando supieron que podían participar del velorio de una forma virtual.
“Ellos llamaron para dar el pésame por la muerte de mi abuelito y se apenaron por no poder viajar para el entierro. Entonces, aproveché y les di la dirección electrónica de la funeraria y pudieron ver todo el proceso del velorio por Internet”, expresó José Luis Gómez, nieto del hombre que recibió los servicios fúnebres en Casanova Funeral Home, en Manatí, la primera empresa en Puerto Rico y Estados Unidos en tener disponible el sistema virtual.

La mente creativa detrás del concepto es la del propietario de la funeraria, Edwin Casanova, quien instaló el servicio hace seis años cuando inauguró el negocio.
“Era una idea que tenía desde hace tiempo porque siempre encontré injusto que las personas no pudieran participar de un evento tan importante por razones de distancia”, dijo sobre el ingenioso programa, cuyos costos de instalación alcanzaron los $10,000.
El funcionamiento de la funeraria virtual está basado en un circuito cerrado a través de 14 cámaras que fueron instaladas en el exterior e interior del local, incluyendo, por supuesto, las capillas.

La transmisión es completamente en vivo y los usuarios necesitan bajar el programa Windows Media Player para poder ver las imágenes que cambian de escenario cada 25 segundos.
“Pueden ver el ataúd pero no se define la persona que está en él, para no violar la intimidad de esa persona y sus familiares. Tampoco, por ley, se permite audio, pues es ilegal grabar conversaciones sin el consentimiento de las partes, y eso sería difícil de controlar”, explicó Casanova sobre el sistema que cubre el área de la cafetería, una sala de niños y estacionamiento del lugar.

El servicio, explicó, está incluido en los paquetes que ofrece la funeraria, cuyos precios comienzan en los $2,000.
“Cuando estamos llenando el contrato, le advertimos a las personas que tenemos el servicio de velorio virtual y tienen que firmar para consentir el mismo”, dijo al agregar que hasta la fecha ninguno de los familiares de las más de 600 personas que han sido veladas en la funeraria han rechazado la oferta.
La acogida de la funeraria virtual ha sido tan exitosa, que muchas funerarias en la Isla han adoptado el concepto.

“De hecho, nosotros hemos recibido la visita de otros dueños de funerarias de Estados Unidos y de otros países, como Venezuela, que vienen para saber cómo funciona y poder instalar el servicio en sus negocios”, expresó el hombre que posee el récord Guiness por ser la funeraria que más transmisiones de velorios virtuales ha registrado.
“En este negocio no hay límites. Incluso, los interesados pueden enviar sus condolencias en la misma página de Internet y se le hará llegar a la familia”, expresó Casanova.