Siguen los asesinatos

Por Tomás de Jesús Mangual
El Vocero
04 de julio de 2009 04:00 amYABUCOA

– Alexis “Alex Tostín” Nazario Báez, de 32 años, hijo éste de un agente policiaco en el área de Humacao, pasó a ser ayer viernes la víctima número 437 de la imparable ola criminal que azota al país, unos 32 asesinatos más que el pasado año.A “Alex Tostín”, quien residía en el residencial Víctor Berríos de Yabucoa, aunque se dice portaba una potente pistola al ser emboscado frente al apartamento 108 de este caserío público por sicarios, no logró defenderse e incluso sus asesinos le robaron luego el arma.

De acuerdo a la Investigación que dirige el teniente Jorge Luyando Pérez, director del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Humacao junto al agente de Homicidios, Carlos Robles Torres y la fiscal Enid Rivera, “Alex Tostín” figuraba como sospechoso del asesinato de un sujeto apodado “Conejo” al que mató en medio de una guerra por el control de las drogas en esta región policíaca.También se informó que a “Alex Tostín” se le catalogaba como un traficante de drogas local e incluso había sido arrestado recientemente por posesión de narcóticos.

Por su parte agentes del CIC de Bayamón lograron ayer viernes en la tarde, esclarecer en “tiempo récord” el asesinato del guardia de seguridad Rafael Díaz Báez, quien murió a manos de un ladrón en el negocio de comida rápida “Taco Maker” ubicado en el sector El Ocho del barrio Buena Vista de esta ciudad. El coronel José A. Morales Vázquez, dijo que por estos hechos se detuvo y se identificó plenamente a José Luis Cruz Acosta de 21 años, sujeto que resultó herido en medio de la balacera donde mató al guardián de seguridad.Por otro lado, en el barrio Mameyal de Dorado se reportó ayer una balacera donde resultó herido con una bala perdida Jorge Acevedo Alvarado, de 59 años.

Este caso es investigado por el agente del CIC Nicolás Maldonado de Bayamón.También en Maunabo resultó herido a puñaladas el joven de 18 años Juan Carlos García Rodríguez al intentar intervenir en una pelea callejera. García Rodríguez, residente en el barrio Palo Seco de esta ciudad, tuvo que ser recluido en el Centro Médico de Río Piedras.