martes, 28 de julio de 2009

Maestro depravado en salón de clases

Martes, 8 de Abril de 2008
Firuzeh Shokooh Valle / Primera Hora


Un maestro de escuela pública acusado en septiembre del 2007 de cometer actos lascivos contra un menor siguió dando clases al menos hasta ayer.
Miguel Miranda Carrasquillo -quien se declaró culpable en febrero- continuaba dando clases de matemáticas ayer a niños de cuarto y quinto grado de la escuela elemental Santiago Iglesias Pantín, en Guaynabo, cuando PRIMERA HORA visitó el plantel para corroborar la información ofrecida por una fuente. La víctima en el caso no era un alumno.


La directora de la escuela, Carmen Cividanes, se mostró ansiosa con la llegada de este diario porque aseguró que desde hace varias semanas -luego de enterarse del caso por la visita de una oficial sociopenal en marzo-, hizo las gestiones pertinentes ante el director regional de San Juan, José Cuevas, y la oficina de la División Legal del Departamento de Educación. Dijo que su petición se estancó en el proceso burocrático.


“No tengo el poder, yo se lo informé a mi jefe... Me preocupa mucho la situación, pero no tengo el poder de decirle a un maestro que no vuelva a la escuela... Quería evitar esto, pero no se actuó rápido”, lamentó Cividanes, directora de la escuela hace diez años.


Abracadabra...
Pero ayer mismo, durante la visita de este diario, Cividanes llamó a Cuevas nuevamente para informarle que la prensa ya estaba al tanto de la situación. En cinco minutos, Cuevas la llamó para decirle que ayer mismo se gestionaría la carta de suspensión sumaria. Cividanes aseguró que no había recibido quejas ni querellas sobre el maestro, quien trabaja hace unos 15 años en la escuela elemental que tiene una matrícula de 423 estudiantes.


¿Usted se ha reunido con él?
-No.
¿Por qué?
-Porque él es una persona muy reservada. Sinceramente, me da vergüenza hablar con él.
Pero es la seguridad de los niños de la escuela.
-Si yo hubiera tenido el poder le hubiera dicho “míster, tenemos que hablar”.
Miranda Carrasquillo, de 44 años, fue acusado en septiembre del 2007 de cometer actos lascivos contra un adolescente de 13 años, según información del fiscal Miguel Cancio, del Tribunal de Bayamón, y de la agente investigadora Grace Maldonado.


Luego de ser arrestado por los hechos que ocurrieron a finales de agosto del 2007, se le encontró causa probable en vista preliminar y antes del juicio se hizo alegación de culpabilidad preacordada. La lectura de sentencia se fijó para el 25 de abril en el Tribunal de Bayamón.
“Hubo una alegación, se refirió a los oficiales probatorios y, de acuerdo al informe, el juez determinará la pena. Se hizo una recomendación de una pena de tres años de probatoria si viene un informe positivo. Esto se hizo en acuerdo con la madre y el menor, para no revictimizarlo. Estos casos son muy dolorosos”, explicó el fiscal Cancio.


Denuncia contundente
La agente Maldonado narró los hechos del caso. La esposa de Miranda Carrasquillo y la madre del menor -cuya identidad no se divulgará para protegerlo- eran amigas. Temprano una mañana salieron juntas, y la madre del menor lo dejó en la casa junto a Carrasquillo Miranda y los dos hijos adolescentes de su esposa. Todos se quedaron durmiendo. El menor se despertó cuando sintió que le estaban tocando sus partes íntimas, agarró un teléfono, se encerró en el baño y llamó al 911. Se quedó en el baño hasta que llegó la Policía.



“En la grabación de la llamada al 9-1-1 se escucha al menor desesperado, tratando de explicar la dirección de la casa. Hasta se escucha en la grabación que el señor le da dos veces a la puerta preguntándole qué hacía en el baño. La del 9-1-1 le dijo que le contestara que estaba haciendo sus necesidades... Allí mismo arrestaron al hombre y al nene se lo tuvieron que llevar en ambulancia por lo nervioso que estaba”, relató la agente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario