jueves, 9 de julio de 2009

En peligro el coquí llanero

jueves, 9 de julio de 2009
Sara M. Justicia Doll
Primera Hora

El coquí llanero, la rana más pequeña de Puerto Rico y que sólo vive en un humedal de agua dulce en Toa Baja, podría recibir protección a nivel federal como especie amenazada o en peligro de extinción, informó ayer el Servicio Federal de Pesca y Vida Silvestre (USFWS)
“Nosotros estaremos examinando toda la información disponible sobre la especie para determinar si la protección federal es necesaria. Exhortamos al público a contribuir y participar en este proceso”, dijo ayer el supervisor de la Oficina de Servicios Ecológicos de USFWS en el Caribe, Edwin Muñiz. Los comentarios deben ser recibidos en la agencia federal en o antes del 8 de septiembre de 2009.


El anuncio del USFW se da mientras en el Tribunal Supremo se ventila el caso en el que el Municipio de Toa Baja y la compañía Sabana Seca Land Management LCC se opusieron a que se declararan las más de 1,500 cuerdas donde vive el coquí llanero, en Toa Baja, hábitat crítico esencial.


Según explicó a este diario el ecólogo y descubridor del coquí llanero, Neftalí Ríos, las más de 1,500 cuerdas de humedal de agua dulce son en su totalidad importantes porque como un entero reúnen todas las características necesarias para la sobrevivencia y reproducción de la especie, población de la cual no hay un número exacto.


Según explicó el científico, el humedal donde habita el pequeño llanero pertenece en parte a la Marina de Estados Unidos, ya que allí estaba la antigua base de Sabana Seca; al Centro de Investigaciones de Primates de la UPR, a la Autoridad de Tierras y el Municipio de Toa Baja.
“Es difícil ver cómo, en términos de las consideraciones científicas, todo el mundo está de acuerdo en protegerlo, sin embargo, el punto neurálgico es respecto a la cuantía de las cuerdas”, dijo el experto.


Y es que aunque el coquí llanero haya sido visto quizás en 300 cuerdas, de las más de 1,500, toda el área es vital para su vida y cualquier intento de fragmentar la zona para desarrollo futuro puede representar el detonante para su extinción.
El humedal donde vive el coquí llanero es herbáceo donde hay plantas muy raras, y su singularidad se debe a que es uno de los pocos de agua dulce que quedan en Puerto Rico.
Con la industria de la caña se afectaron mucho los humedales dulces que había, pero éste subsistió.


El agua dulce proviene de dentro de la tierra, de la zona kársica y de dos cuencas hidrográficas.
“El coquí llanero es particularmente delicado porque es el menos abundante de los otros que viven en dicho humedal”, agregó Ríos.
Junto al llanero residen el coquí común, el coquí de hierbas, el coquí silbador, la ranita de labio blanco y el coquí de las Antillas.

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