Vitamina C es enemiga del cáncer

miércoles, 14 de enero de 2009
Rosita Marrero
Primera Hora

Una esperanza... una mejor calidad de vida.
La lamentable nueva de que el actor Miguelángel Suárez padece un cáncer terminal del esófago, además de entristecer a muchos, renueva la esperanza de que existe un método alterno al tratamiento convencional del cáncer, que no necesariamente pudiera conducir a una remisión pero sí a una mejor calidad de vida.

Debido a lo avanzado de su cáncer, Suárez acudió a unos investigadores del Recinto de Ciencias Médicas, uno, su amigo, el doctor Jorge Miranda, y el colega Michael González, quienes en 1999 comenzaron a trabajar en el Centro de Mejoramiento del Funcionamiento Humano, en Wichita, Kansas, junto con el fenecido médico Hugh Riordan, pionero en la utilización de vitamina C intravenosa.

Desde entonces, los científicos han continuado la investigación, como parte del proyecto Rednac, trabajando con células, ratones y humanos.
La vitamina C constituye sólo una parte de la investigación en la que están inmersos Miranda y González. Ambos biólogos se concentran en el estudio de la raíz bioquímica de las degeneraciones de tejido en general y toda enfermedad degenerativa.

“Él (Suárez) está en un estado bastante avanzado. Las terapias convencionales que se le pueden proveer ahora mismo no le dan garantía de nada y puede haber mucho efectos secundarios con el tratamiento”, dijo González en referencia al tratamiento de quimio y radioterapia.
“Hemos estudiado alternativas no tóxicas que mejoran la calidad de vida, que la persona se sienta mejor, que tenga apetito y mucha energía”, expuso González.

Agregó que “muchas personas han tenido regresiones de las enfermedades y están en remisión”.
Nueva teoría
Los galenos tienen una nueva teoría en torno al origen del cáncer que, de probarse, se tendrían que botar los libros y la noción que al presente se tiene de la enfermedad.
“Pensamos que el cáncer comienza con daño a la mitocondria, que es la parte de la célula que genera energía. La célula dañada no puede generar la energía como siempre lo hacía. Se vuelve una célula primitiva y se cree que está en un estado como embriónico, sin diferenciación. Se dividen, pero no se diferencian. Está tratando de sobrevivir con poca energía”, explicó González.

Agregó que, normalmente, la célula utiliza energía aeróbica, que es la que provee la mitocondria y que las células dañadas utilizan energía anaeróbica, que es sin oxígeno.
La mayor fuente de energía de las células es el azúcar y ésta precisamente es que más hace crecer los tumores, sostienen ambos investigadores. Es por esto que, como parte del tratamiento que recomiendan, prohíben el consumo de dulces, refrescos y toda comida que contenga azúcar refinada. “Lo único que permitimos son las frutas, la ingesta alta de vegetales, agua destilada, ejercicio y suplementos de otros nutrientes”, mantuvo González.

aplica a toda etapa
El doctor Jorge Miranda considera que el tratamiento con vitamina C intravenosa es poderoso y puede aplicarse a pacientes de cáncer en el estado inicial, avanzado, en remisión e inclusive preventivo.

“La célula de cáncer tiene muchos canales para entrar glucosa porque es la única forma de producir energía. La vitamina C se parece mucho a la glucosa y se mete por ese canal. La belleza aquí es que las células normales, al no tener tantos canales de ésos, les entra menos vitamina C, pero lo que entra lo puede manejar muy bien. La célula dañada no la puede manejar bien, porque le faltan unas enzimas y producen sustancias tóxicas, especialmente peróxido”, dijo.
“Lo que entra no se puede metabolizar. Eso hace la vitamina C selectivamente tóxica para la célula del cáncer e inofensiva para la normal”, mantuvo.

Los médicos consideran que la vitamina C se puede usar junto con la quimio, la radiación o sola. Indican que de ninguna manera desean contravenir las indicaciones de un oncólogo. La decisión es del paciente porque, después de todo, su vida es la que está en juego.