No es una “gracia”, es un delito el vídeo porno en el que aparecen adolescentes

No es una “gracia”, es un delito el vídeo porno en el que aparecen adolescentes
En el vídeo que está circulando por las escuelas del país de dos menores teniendo relaciones sexuales, éstos pueden ser procesados por las leyes estatales, pero no por las federales, ya que el Gobierno federal no procesa a menores por este delito.(Cortesía Wapa TV)
viernes, 20 de mayo de 2011
Maritza Díaz Alcaide / Primera Hora

La “gracia” podría costarles cara.

La posesión y distribución de pornografía infantil es delito y, por lo tanto, los menores que se están enviando por celular un vídeo en que estudiantes practican sexo abiertamente podrían ser procesados bajo las leyes de Puerto Rico.

La supervisora del Grupo de Crímenes Cibernéticos del Servicio Federal de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), Rebecca González, indicó ayer que esa dependencia investigará la procedencia del vídeo que está circulado por las escuelas del país, para determinar si hay adultos involucrados en su producción, posesión o transmisión.

González aclaró que, con respecto a estos delitos, el Gobierno federal no procesa a los menores de 18 años. Esa facultad le compete al Departamento de Justicia.


En el caso de los adultos, bajo la ley federal, el delito de distribución de este tipo de material se castiga con una pena mínima de cinco años de reclusión.

La posesión no tiene un término fijo de cárcel, pero sí una pena máxima de confinamiento de 10 años.

En Puerto Rico, la posesión y distribución de pornografía infantil es un delito grave de tercer grado, por lo que conlleva una pena de entre tres años y un día y ocho años de cárcel.

“Nos vamos a reunir con Justicia para ver qué determinación harían los procuradores de menores en este caso”, señaló la funcionaria.

González reveló que a ICE no han llegado querellas de material pornográfico en las escuelas. Dijo que usualmente los jóvenes se toman fotos o vídeos en sus casas.

Mientras tanto, el secretario de Educación, Jesús Rivera Sánchez, se expresó consternado por el vídeo de escenas explícitamente sexuales, que se presume fue grabado fuera de la Isla.

Rivera Sánchez les echó la culpa a los padres que les compran celulares con Internet y mensajería de texto a sus hijos. En las escuelas, dijo, está prohibido el uso de los móviles, pero los alumnos los pueden cargar en sus bultos y éstos no se les inspeccionan.

Por su parte, la sexóloga Carmen Varcárcel advirtió ayer sobre el peligro de la distribución de este material.

Indicó que estos vídeos pueden incitar a los menores a tener relaciones sexuales “por instinto, y no por razonamiento”.

Sin ningún tipo de educación previa, dijo, se va a distorsionar la sexualidad saludable. No se miden consecuencias, ni hay sentimientos en la relación. “Es algo descontrolado”, sostuvo.