29 Octubre 2010
Tratamiento con ‘medical foods’
Se utilizan para afecciones con necesidades específicas de nutrientes
Por Ileana Delgado Castro / idelgado@elnuevodia.com
Hace más de cinco años, Frances sufre de varias afecciones de salud, incluyendo polimialgia, un trastorno inflamatorio que involucra dolor y rigidez en el área de la cadera o del hombro. Y aunque dice que le han recetado casi todos los medicamentos que han salido en los últimos años, no ha logrado alivio con ninguno.
Pero hace unos meses, su médico le recetó un nuevo medicamento, Limbrel, que, según dice, le ha dado unos resultados extraordinarios.
Frances se refiere a una categoría específica de agentes terapéuticos distintos a los medicamentos tradicionales y a los suplementos nutricionales, que se conocen como ‘medical foods’. Según dos investigadores del Recinto de Ciencias Médicas, la experiencia clínica ha corroborado su tolerabilidad, seguridad y efectividad.
"Actualmente los ‘medical foods’ están ganando prominencia clínica y aceptación como una manera más segura y costoefectiva de manejar los procesos metabólicos en los estados de enfermedad, especialmente las enfermedades crónicas", indica el farmacólogo Jorge Miranda Massari, investigador y catedrático de la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, quien junto a su colega, el bioquímico y catedrático Michael González, han estudiado la bioquímica nutricional y el concepto de corrección metabólica.
"Desde hace mucho tiempo, nosotros proponemos que es necesario corregir primero los problemas metabólicos. Lo que pasa es que, al hacer intervenciones médicas en un paciente cuyo metabolismo no está trabajando adecuadamente, estás aliviando síntomas y no el problema real", explica Miranda, tras resaltar que los productos clasificados bajo la categoría de ‘medical foods’ se utilizan para el manejo metabólico nutricional de una enfermedad o afección que tenga necesidades específicas de nutrientes.
"Son productos regulados por la Agencia Federal de Drogas y Alimentos (FDA en inglés), que requieren evaluación y prescripción médica para su dispensación en las farmacias", agrega Miranda, quien destaca que para ser considerado ‘medical food’ el producto debe cumplir con los siguientes requisitos:
• Está formulado para el manejo de un padecimiento de salud que tiene una necesidad metabólica específica que no puede ser suplida por la alimentación.
• Es utilizado bajo supervisión médica.
• Sólo se obtiene mediante prescripción médica.
• Debe ser administrado oralmente.
• Está formulado con ingredientes generalmente reconocidos como seguros.
• Los reclamos de seguridad y eficacia están basados en reconocidos principios científicos, datos de laboratorios y estudios clínicos.
Según explican ambos investigadores, las afecciones o enfermedades manejadas por los ‘medical foods’ van desde trastornos genéticos hasta cambios metabólicos. Por ejemplo, enfermedades inflamatorias, disminución en la densidad y fragilidad de los huesos, pérdida temprana de memoria, neuropatía diabética, depresión y disturbios metabólicos que aumentan los riesgos de diversas condiciones.
"Distinto a los medicamentos, los ‘medical foods’ modulan o corrigen los procesos metabólicos, ya bien sea proveyendo precursores en la formación de las moléculas que están deficientes o como cofactores que favorecen su formación", indica González.
En ese sentido, estos productos son parte integral del plan de manejo de la enfermedad y no meramente una estrategia de reducción de riesgo, agrega Miranda, aunque aclara que también pueden servir para ese propósito. Por eso, es un médico licenciado el profesional que en ley está calificado para prescribir un ‘medical food’ y darle seguimiento al paciente.
Precisamente, para la neuróloga Ivonne Fraga Berríos, la experiencia que ha tenido con sus pacientes con uno de esos productos ha sido muy satisfactoria. Particularmente, entre las personas con pérdida temprana de memoria.
"Utilizo el ‘medical food’ como una terapia adyuvante (en conjunto con otros medicamentos), tratando de promover la salud de la neurona", dice Fraga, tras explicar que usa un producto conocido como Cerefolin NAC que tiene ingredientes que bajan el nivel de homocisteína, un metabolito tóxico producto del metabolismo de las proteínas y que algunas personas tienden a acumular. Además de que contiene ingredientes que son importantes para el metabolismo neuronal, añade Fraga.
"Tengo pacientes con Alzheimer que se han estabilizado, aunque no se sabe si es por el ‘medical food’ o por la combinación con los medicamentos tradicionales. Pero tengo pacientes que les va muy bien", indica Fraga, aunque destaca que estos productos no los cubre ningún plan médico. "Una terapia puede salir entre $50 y $70 mensual. Pero mi experiencia es que, aún así, el 95% de los pacientes están dispuestos a hacer ese gasto", agrega, aunque acepta que todavía mucho médicos no creen en los beneficios de los ‘medical foods’.
Corrección metabólica
Según Miranda y González, hay varias afecciones crónicas que pueden manejarse haciendo corrección metabólica con un ‘medical foods’. A continuación, una descripción breve de algunos padecimientos crónicos que ellos creen que se pueden beneficiar.
• Neuropatía periferal diabética (NPD)
"En Puerto Rico, la diabetes ya alcanza un 13% de nuestra población. Y se sabe que mientras más años se padezca, mayor probabilidad de desarrollar NPD", explica Miranda, mientras señala que actualmente el énfasis de la corrección metabólica se ha limitado al control glicémico, mientras que las guías de tratamiento se centran en tratar los síntomas de dolor.
Metanx -que en su fórmula contiene L-metilfolato y las formas activas de B6 y B12- es un ‘medical food’ que puede ayudar en el tratamiento de NPD, indica Miranda.
"Esta preparación ha sido estudiada en el manejo de la neuropatía periferal diabética y se han demostrado múltiples beneficios. Entre ellos, su capacidad de aliviar el dolor mejor que acetaminofén. Además se ha encontrado que permite recuperar parte de la pérdida de sensación causada por la neuropatía, así como mejorar el flujo sanguíneo y la densidad de las fibras nerviosas epidermales", agrega el investigador, tras resaltar que otro aspecto importante en el manejo del paciente diabético es que Metanx tiene el potencial de reducir las complicaciones por los efectos adversos de metformin, un importante fármaco para el manejo de la diabetes tipo 2.
De hecho, Miranda y González indican que este medicamento se ha asociado recientemente con un aumento en la homocisteína, disminución en vitamina B12 y empeoramiento de la neuropatía. Pero explican que, con el uso de Metanx, se puede proteger al paciente del riesgo aumentado de NPD por metformin.
• Depresión
Según los investigadores, se estima que un 18% de la población adulta puertorriqueña padece de depresión, una afección que presenta un cuadro de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o baja autoestima, disturbios del sueño y apetito, baja energía y pobre concentración. Según indican, la depresión ha sido asociada a un desbalance de tres neurotransmisores: serotonina, norepinefrina y dopamina. Pero la mayoría de los antidepresivos solamente mejoran la actividad de neurotransmisores ya existentes en el cerebro.
Pero a ese tratamiento se puede añadir Deplin, un ‘medical food’ que contiene L-metilfolato que ayuda a la corrección metabólica específica de las necesidades de pacientes con depresión. Ambos investigadores indican que siete de cada 10 personas con depresión pueden sufrir un problema genético específico que limita su habilidad de convertir acido fólico o folate en L-metilfolato.
En ese sentido, al añadir L-metilfolato a la terapia se promueve la producción de neurotransmisores y se puede alcanzar una respuesta completa.
"El L-metilfolato es la única forma de folato que usa el cerebro para corregir los desbalances de neurotransmisores relacionados a la depresión. Ensayos clínicos demuestran que añadiendo metilfolato a la terapia antidepresiva al inicio produce una mejoría significativa en síntomas depresivos", explican.
• Osteoartritis
Es una afección inflamatoria y dolorosa de las articulaciones que lleva a su degeneración destructiva. En ese caso, señala Miranda, el Limbrel es un ‘medical food’ que atiende el requerimiento nutricional distintivo de pacientes con osteoartritis.
Según explica, su fórmula consiste de flavonoides en los niveles altos necesarios para satisfacer las necesidades metabólicas para el control de la inflamación articular de personas con osteoartritis y que no pueden obtener de su alimentación o dieta solamente. También actúa como un fuerte antioxidante.
"Esta alta actividad antioxidante protege las articulaciones de daño por acción de moléculas reactivas de oxígeno. Los estudios han demostrado resultados equivalentes en el control del dolor a naproxen, tiene una tolerabilidad y seguridad superior a otros antiinflamatorios y puede utilizarse en pacientes alérgicos", resalta Miranda.
• Osteopenia
Se caracteriza por una disminución de la masa ósea por debajo de los índices normales que corresponden a la edad, sexo y raza de un individuo.
De hecho, Miranda y González señalan que la osteopenia es el umbral de la osteoporosis, una enfermedad "silenciosa" que debilita los huesos, haciéndolos quebradizos y susceptibles a fracturarse con facilidad.
Un ‘medical food’ que ellos recomiendan es Fosteum, especialmente formulado para el manejo clínico dietario del proceso metabólico de la osteopenia y la osteoporosis. Explican que el producto tiene ingredientes que trabajan independientemente para promover mineralización en hueso, además de facilitar la absorción de calcio. "Aumenta la densidad de la masa ósea así como los bifosfonatos, pero sin los efectos secundarios", agregan. Y destacan que los estudios han demostrado que el medicamento posee un alto nivel de seguridad y que puede reducir la intensidad y frecuencia de los episodios de sofocones característicos de la menopausia.
Características
• Están formulados para el manejo de un padecimiento de salud que tiene una necesidad metabólica específica que no puede ser suplida por la alimentación.
• Necesitan supervisión médica.
• Sólo se obtienen mediante prescripción.
• No los cubre ningún plan de salud.
Para qué sirven
Las afecciones o enfermedades manejadas por los ‘medical foods’ van desde trastornos genéticos hasta cambios metabólicos. Por ejemplo:
• enfermedades inflamatorias
• disminución en la densidad y fragilidad de los huesos
• pérdida temprana de memoria
• neuropatía diabética
• depresión
• disturbios metabólicos
Sus nutrientes específicos le permiten al paciente regresar a un equilibrio similar al de las condiciones fisiológicas anteriores a la enfermedad, que se consideran normales en un paciente sano.
Fuente: Dr. Jorge Miranda Massari y Dr. Michael González
Conoce la diferencia
• ‘Medical foods’: son formulados para una población enferma específica que debe llenar el requisito de una necesidad nutricional. Requiere supervisión médica y receta.
• Suplementos nutricionales: son para complementar la alimentación de la población saludable y se venden ‘over the counter’.
• Medicamentos: son de origen sintético, no necesariamente contienen nutrientes y no tienen una función metabólica correctora.
Fuente: Dr. Jorge Miranda Massari y Dr. Michael González
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