A su suerte más de 1,200 niños

22 Octubre 2010

A su suerte más de 1,200 niños
Siguen las quejas en los planteles


Padres, maestros y estudiantes de la escuela Ángel Sandín Martínez, de Vega Baja, reclamaron acción al DE. (Aurora Rivera Arguinzoni)
Por Aurora Rivera Arguinzoni / arivera@elnuevodia.com

Venta de drogas y sexo dentro del plantel, agresiones con arma blanca, acoso entre estudiantes (‘bullying’) y contacto con extraños son algunos de los peligros mayores que enfrentan día a día los 1,207 alumnos de la escuela intermedia Ángel Sandín Martínez, de Vega Baja.

El plantel ha operado en horario alterno por más de 30 años -de 7:30 a.m. a 12:30 p.m. y de 12:30 p.m. a 5:30 p.m.- debido a la gran cantidad de estudiantes que matriculados. Por dichas razones tenía dos directores, pero desde septiembre no tiene ninguno. Como si fuera poco, por los pasados años ha sido sede de la escuela nocturna para adultos, por lo que algunos de éstos ya están en los alrededores cuando los últimos niños en salir de clases abandonan el lugar.

A estas situaciones se suman problemas de infraestructura, falta de seguridad, de iluminación, de conserjes, de aseo, de maestros, de empleados de comedor, ausencia de servicio telefónico, problemas eléctricos y de suplido de agua, entre otros, lo que provocó que ayer los padres paralizaran las clases. Ya lo habían advertido en una carta entregada a la oficina de la Región de Arecibo del Departamento de Educación (DE) el 14 de octubre de 2010.

“Hemos observado cuidadosamente lo que sucede en la escuela y, alarmados, nos hemos organizado, hemos hecho oír nuestra voz... y si es necesario acudiremos ante el Secretario y la prensa”, lee la misiva del Comité de Padres Organizados Pro-Estudiantes del Nivel Intermedio de Vega Baja.

Ante la protesta pública iniciada a las 4:00 a.m. de ayer, finalmente coincidieron en la escuela el director de la Región de Arecibo, Fernando Hernández Pérez; la superintendente del Distrito de Vega Baja, Carmen Cartagena Rivera; representantes de la Autoridad de Edificios Públicos (AEP) y la Oficina para el Mejoramiento de Escuelas Públicas (OMEP); el representante Rafael “Tatito” Hernández y Duhamel Adames Rodríguez, legislador municipal y ayudante de la representante María Vega Pagán.

De inmediato se ordenó el destaque de Abner Resto, uno de dos directores nombrados en otra de las cuatro escuelas intermedias del pueblo, y que también opera en horario alterno por su elevada matrícula. El profesor es egresado de la Ángel Sandín Martínez y ayer mismo comenzó a organizar a los padres y a la facultad.

Tras más de una hora de conversaciones con representantes de padres y maestros, Hernández Pérez se despidió con la promesa de ir a la sede del DE, en Hato Rey, a exigir que se autorizaran las plazas de directores. Dijo que una fue congelada por la Junta de Reestructuración y Estabilización Fiscal (JREF) cuando el funcionario anterior se jubiló hace más de un año. Mientras, la directora que quedó en funciones, identificada como Milagros Cano, está reportada al Fondo del Seguro del Estado, según trascendió.

Su esperanza era que ayer mismo le aprobaran los puestos para hacer la convocatoria y comenzar el proceso de reclutamiento, pero no pudo ser contactado en la tarde para confirmar si lo logró.

“¡Hay cosas que tiene que resolverse ya!”, urgió Glorivee Otero, madre de dos alumnas de noveno grado cuya salud física y emocional se ha visto afectada por las situaciones expuestas. Se informó que de no resolverse estas situaciones, los padres protestarán otra vez.

Signos de la debacle

No hay teléfono ni fax desde 2008.

Faltan los dos directores.

Sólo hay tres conserjes desde enero.

Sólo dos empleadas de comedor.

Seguridad hasta antes que terminen las clases, y ninguna de noche.

Faltan cuatro maestros.

Baños sin agua y/o unisex.

Salones sin agua.

Problemas eléctricos.

Comején en salones y el comedor.

Filtraciones, alcantarillas tapadas e inundaciones.

Fuentes de agua vandalizadas.

La Banda Escolar fue desmantelada.

Portón roto permite acceso de extraños y de adictos en las noches.

Asistentes a escuela nocturna de adultos coinciden con los niños.

Alta conducta sexual; hasta condones se encuentran en el patio.

Transporte escolar descoordinado ha dejado niños abandonados.