Amenaza particular a jóvenes

Por Zenaida Ramos Ramos
EL VOCERO 21 de julio de 2009 04:00 am

Aunque las personas de cualquier edad están en riesgo de contagiarse con la influenza A H1N1, el grupo poblacional entre los 20 y los 45 años está siendo el más afectado porque no ha creado anticuerpos contra los virus relacionados con este tipo de gripe.


“Se piensa que al ser un virus cambiante, por lo tanto, no hay anticuerpos en este grupo de personas contra este virus. No hay ningún tipo de defensa. Otras personas, con el tiempo, han desarrollado una defensa parcial al enfrentarse a primos relacionados con este virus y tienen este tipo de respuesta. La gente joven no está en ese grupo de personas que haya sido expuesto anteriormente a la vacuna o a la influenza”, expuso el doctor Alvaro Aranda, neumólogo de adultos.


La influenza A H1N1 es más prevalente en grupos de edades jóvenes, contrario a la gripe común o influenza A, según el médico.
“Está el pico de menos de 4 años de edad, pero está el pico entre los 20 y 45 años de edad y otro pico después de los 60 años de edad”, indicó el doctor Aranda, profesor ad honorem en la Escuela de Medicina del Recinto de Ciencias Médicas.


La mortalidad en las personas jóvenes ocurre no tanto por “el virus per se, sino que el virus desata una respuesta inmunológica tan intensa que el mismo sistema inmune crea una respuesta exagerada a esta infección y eso en realidad causa el problema que esas personas caigan en un fallo respiratorio y en una condición que se llama síndrome de angustia respiratoria aguda. Es lo más severo que puede ocurrir en el pulmón”.


El sistema inmune fortalecido defiende al cuerpo de organismos infecciosos, por ejemplo, bacterias, parásitos y virus como el H1N1. “Debido a que el cuerpo humano proporciona un ambiente ideal para muchos microbios, ellos intentan pasar la barrera de su piel y entrar en él. Su sistema inmunológico es una red de células, tejidos y órganos por todo el cuerpo que ha evolucionado para defenderlo(a) contra tales invasores extraños”, informa el Instituto Nacional del Cáncer.
Lo que la influenza A H1N1 desencadena en el sistema inmunológico de los jóvenes se llama científicamente una tormenta de citoquina.
“En las personas mayores, al tener un sistema inmune que no está tan potente no disparan una respuesta exagerada. No quiere decir que no pueda ocurrir”, señaló el galeno.
Por otro lado, el sistema inmune de los jóvenes está más predispuesto a “desarrollar respuesta exagerada porque tienen un sistema intacto y esa respuesta exagerada crea una tormenta de citoquina”.


Las citoquinas son unas moléculas “que van a mediar en el mecanismo de defensa del cuerpo y a construir mensajeros para construir anticuerpos y sistemas de defensa”.
El sistema inmune de los jóvenes responde de manera exagerada contra las infecciones y mata el virus, pero a la vez “desata una destrucción del propio tejido del cuerpo y al ser una enfermedad respiratoria ataca al pulmón”.


Decenas de muchachas y muchachos suelen pensar que pueden combatir cualquier enfermedad por simplemente ser jóvenes, por ende, descuidan su salud. Sin embargo, deben tomar seriamente las medidas preventivas contra la influenza A H1N1 y otras enfermedades, al igual que el resto de los ciudadanos.